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Miércoles 29 de Octubre, Neuquén, Argentina
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“Les pido que me acompañen en el pedido de justicia”: Después de la pesadilla, Alison Calfunao visitó los estudios de AM550

La joven neuquina regresó el viernes a Neuquén. Recibió un trasplante de corazón, le amputaron una pierna para salvarle la vida y sufrió dos paros cardiorrespiratorios en una cirugía de ligaduras de trompas. Contó todo lo que sufrió junto a su familia.

Miércoles, 29 de octubre de 2025 a las 10:52
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“Quiero agradecerle a la gente que me acompañó, a todos los que oraron por mí, es lindo ver tanto apoyo. Ahora les pido que me acompañen en el pedido de justicia”. Fueron las palabras de Alison Calfunao, quien junto a su esposo Emiliano y sus hijos, Dylan y Valentín, se tomaron un tiempo para pasar por los estudios de AM550, el primer medio de comunicación que visitó, tras su llegada a la ciudad. La neuquina contó en detalle la pesadilla que vivió luego de una cirugía de ligaduras de trompas, tras la cual terminó con un corazón trasplantado y la amputación de una de sus piernas. 

“Hoy estoy bien, un poco más tranquila. Extrañaba mucho Neuquén. Ahora estamos en la casa de una tía, hasta que se acomode todo: lo judicial, mi salud… No puedo estar sola, tengo que estar acompañada y mi marido tiene que volver a trabajar”, relató Alison en diálogo con Pancho Casado en La Mañana es de la Primera por AM550 y el canal de noticias 24/7

Alison y su familia regresaron a Neuquén el viernes pasado, después de vivir durante meses en Buenos Aires, entre salas de esperas y quirófanos. Todo comenzó el 9 de junio, cuando se realizó una intervención quirúrgica, que en la previa parecía sencilla. Era una ligadura de trompas, pero por motivos que la Justicia debe esclarecer, sufrió dos paros cardiorrespiratorios y tuvo que ser trasladada en un vuelo de urgencia al Hospital Italiano, donde le realizaron un trasplante de corazón y más tarde tuvieron que amputarle la pierna derecha, por encima de la rodilla.

Fueron meses de extrema angustia, en los que la vida de Alison estuvo en peligro. “Yo desperté en Buenos Aires. Después de la cirugía en Neuquén no supe nada de lo que pasó, desperté allá, con el corazón trasplantado…”, contó en los estudios de AM550, con sus dos hijos junto a ella, quienes la cuidan y la miman con mucho amor. Al tercer día de llegar a la capital nacional, apareció un corazón, el cual pertenecía a un donante neuquino. “Para nosotros fue un milagro, por algo se dio todo tan redondo a pesar de la desgracia”, señaló Emiliano.

Para Alison y Emiliano ahora comienza una etapa compleja en la que exigirán justicia. Este martes presentaron en Fiscalía el informe del médico forense Francisco Delgado de General Roca, un documento de 115 páginas, en la que se detalla una serie de irregularidades en el accionar médico que casi provoca la muerte de la joven neuquina. El informe forense concluye que mientras la paciente era intervenida quirúrgicamente sufrió “una hemorragia progresiva importante, por lesión de un vaso arterial o venoso, en el interior del abdomen. Esta situación, no fue advertida y su progreso llevó a la disminución del volumen sanguíneo efectivo (hemorragia/anemia aguda) con deterioro de la oxigenación, lo que culminó de manera previsible con un primer paro cardíaco y respiratorio del cual fue reanimada luego de 10 minutos, en los cuales no hubo valores de capnografía adecuados para las normas de reanimación cardiopulmonar”. Y luego, la pesadilla continuó…

“Fue una angustia terrible todo ese tiempo, porque fue muy turbio todo “, expresó Emiliano, quien aseguró que en la clínica San Lucas de Neuquén, al momento de la cirugía no tenían una sala de terapia intensiva ni una ambulancia. Y más tarde, cuando les solicitaron los informes médicos demoraron en entregarlos. “Pudieron haber borrado las pruebas”, indicó.

Mientras Alison continúa con su recuperación, esperan que la Justicia los llame para una nueva audiencia. “Queremos que se impute a los responsables”, afirmó Emiliano.  “Yo no tenía nada, están todos los prequirúrgicos entregados”, agregó Alison, quien convive con días buenos, otros no tanto, y otros en los que le cuesta levantarse. 

“A veces ni yo creo todo lo que pasó. Mirarme a la noche, mientras me vendo y me curo los puntos que todavía tengo, es fuerte… Hay días en los que no puedo, me cuesta levantarme, estoy todo el día llorando”, contó con la voz quebrada. A la angustia se suman los dolores, sobre todo por la noche: “Me duele el pecho, me duele la espalda. A la noche no puedo hacer nada por el dolor. La prótesis pesa un montón al caminar. Tengo que cuidarme con las comidas, no puedo enfermarme… Es una lucha diaria”. 

Alison deberá tomar medicamentos de por vida, tres veces al día, la cual deben pedirla con mucha tiempo de anticipación, ya que de eso depende su vida. La neuquina contó que los profesionales que la operaron y quienes estuvieron en la sala de cirugía nunca se comunicaron con ella. De todas formas, ella no quiere escucharlos. “El médico que me operó nunca se comunicó conmigo, pero no quiero hablar con ellos”, aseguró.

Parte de la indignación de la familia es que los profesionales, tanto el ginecólogo como el anestesista, siguen trabajando. “Siguen dando turnos y sabemos que han tenido muchos problemas con otras pacientes. Muchas de ellas se comunicaron conmigo y me contaron cosas muy terribles. Yo les dije que iba a buscar Justicia. Les daba la fuerza que yo no tenía”, expresó. 

“Todos los días le ponemos energía, porque ella se decae y tenemos que levantarle el ánimo. Ellos (por Dylan y Valentín) la miman mucho a su mamá, iban todos los días a verla”, relató Emiliano. “Todo esas cosas que sufrimos, estos médicos no las saben. Salimos a las 5 de la mañana con los dos chicos, que daban vueltas conmigo en una ciudad tan grande hasta las 18… Eso no se lo deseo a nadie. Sufrimos mucho”, manifestó; y agregó: “Gracias a Dios, seguimos en familia los cuatro unidos. No nos sentimos solos nunca allá en Buenos Aires”. 

“Quiero agradecerle a la gente, a todos los medios por darme el espacio, a todos los que que oraron por mi. Es muy lindo ver todo eso. Le doy gracias a ese ángel que me dio el corazón y me dio vida. Ahora en el pedido de justicia les pido que me acompañen”, expresó Alison, quien en medio del dolor y la angustia tiene la esperanza de que haya Justicia. “Le pido a Dios que salga todo bien para mi, pero esto no tendría que haber pasado. Lamento tanto haber ido ese día, aunque se que no tengo la culpa, siento eso…”, cerró la neuquina, una luchadora de la vida, que ahora exige Justicia. 

MIRÁ LA NOTA COMPLETA ACÁ:

 

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