Los gobiernos de Neuquén, Río Negro y Chubut impulsan un proyecto regional que busca mejorar la prevención y el combate de los incendios forestales. La propuesta se centra en crear un Comando Conjunto Patagónico para unificar esfuerzos y garantizar una respuesta temprana en las horas críticas de un siniestro.
La iniciativa es coordinada por la Secretaría de Emergencias, a cargo de Luciana Ortiz Luna, y pretende articular el trabajo de alrededor de 600 brigadistas de la región. El objetivo principal es contar con protocolos unificados que permitan optimizar la logística y el despliegue de recursos en los territorios afectados.
El plan se basa en dos ejes: la creación de un comando único regional, que centralice la toma de decisiones, y la definición de procedimientos operativos estándar. Estas herramientas buscan garantizar acciones coordinadas entre provincias y una capacidad de respuesta eficaz frente a emergencias ambientales.
Según Ortiz Luna, el incendio de Valle Magdalena dejó enseñanzas fundamentales que hoy se transforman en protocolos concretos. Estos lineamientos permitirán dar una respuesta unificada y más efectiva, mejorando la actuación de los equipos de brigadistas en campo.
Si la propuesta avanza, durante la temporada 2025/26 se consolidarán bases de coordinación, se trabajará en la unificación de sistemas de comunicación y se realizarán entrenamientos conjuntos. La funcionaria destacó que el trabajo conjunto entre provincias es clave para fortalecer la protección regional y reducir riesgos en la Patagonia.