Debido a un problema del suministro de agua en barrios de Aluminé, el Ente Provincial de Agua y Saneamiento (EPAS) trabaja con las autoridades locales para reforzar el servicio de agua potable. La falla es causada por la rotura de un equipo de bombeo que alimenta dos cisternas principales de la ciudad.
La combinación entre la merma en la capacidad de bombeo por la rotura y el aumento considerable del consumo -debido a la gran cantidad de brigadistas que combaten el incendio en el Parque Nacional Lanín y son alojados en la localidad- dificultaron el mantenimiento de los caudales necesarios para garantizar presión en la red y abastecer a todos los usuarios.
El presidente del EPAS, Gustavo Hernández, aclaró que la situación “es particular porque las necesidades en la localidad incrementaron considerablemente ya que la población alojada hoy es extraordinaria. Desde el ente, multiplican las acciones para atender estas necesidades”.
El plan diseñado por el EPAS prevé reforzar y sostener los niveles en las cisternas mediante la inyección de agua potable con camiones. De esta forma, busca sustituir el agua que no ingresa al tanque por los desperfectos de la bomba y garantizar que todos los vecinos y personal de brigada puedan disponer del recurso.
Durante el mediodía del viernes, una cuadrilla del ente viajó a la localidad con la bomba reparada y el personal necesario para realizar su montaje. Estiman que, el fin de semana, el sistema de agua potable recuperará su capacidad total, permitiendo la normalización progresiva del servicio.
Dado lo específico de los repuestos del equipo y la complejidad en su reparación, debieron trasladarlos a un taller electromecánico especializado en Neuquén Capital. Mientras tanto, el EPAS dispuso los camiones cisterna para asegurar el suministro en los sectores más afectados.