En una noche de alto voltaje en el Maracaná, Racing casi logra lo que se propuso: salir vivo de Brasil. El equipo de Gustavo Costas mostró carácter y orden táctico frente a uno de los rivales más poderosos de América. Durante gran parte del encuentro, la Academia sostuvo la parada y, a pesar de la superioridad territorial de Flamengo, no se vio superado en intensidad ni concentración.
El primer tiempo fue parejo, con situaciones de peligro para ambos lados y un Racing que logró sostener el cero en su arco. En el segundo tiempo, el equipo argentino intentó ganar metros y aprovechar los espacios que dejaba el local, generando algunas chances que podrían haber cambiado la historia.
Sin embargo, cuando parecía que el empate sería el resultado final, Flamengo encontró el gol a los 43 minutos del segundo tiempo. Carrascal remató y la pelota desvió en Marcos Rojo, descolocando a Facundo Cambeses y desatando la euforia en el Maracaná.
A pesar de la derrota, la actuación de Racing dejó una sensación positiva: la serie sigue abierta y el Cilindro será el escenario para intentar dar el golpe en la revancha.