Una noche que tuvo de todo en el Cilindro de Avellaneda comenzó con un percance inesperado: el micro de Flamengo sufrió problemas para llegar a disputar el duelo contra Racing, por la revancha de las semifinales de la Copa Libertadores. El encuentro finalmente se retrasó 20 minutos por pedido del elenco brasileño.
El Mengão, que concentró en el predio de Defensa y Justicia en Hudson, en la zona sur del conurbano bonaerense, tardó 1 hora y 40 minutos en llegar al Cilindro de Avellaneda, por lo que la solicitud de la delegación carioca fue demorar unos minutos el comienzo del partido, noticia que se conoció alrededor de las 20.30. El presidente Rodolfo Landim, fue el principal impulsor de la decisión, amparado en el reglamento que contempla que los equipos tienen derecho a estar en los vestuarios al menos una hora y media antes del pitazo inicial.
Cerca de las 20.15, el micro de Flamengo quedó atrapado la zona de Puente Pueyrredón, a unas pocas cuadras del estadio. No obstante, al estar prácticamente frenado por completo el tránsito cuando la delegación se dirigía hacia la cancha de la Academia, les fue imposible arribar antes. Además, el partido también estuvo demorado luego del tremendo recibimiento del público de Racing a su equipo, ya que el despliegue de pirotecnia obligó a esperar a que el humo se disipe para comenzar a jugar.