En San Juan se vive un final de película. San Martín llega a la última fecha del Torneo Clausura con una situación tan increíble como inédita: puede meterse entre los ocho mejores del campeonato… o perder la categoría.
El equipo cuyano, que suma 19 puntos y pelea por el último boleto a los playoffs, enfrenta a Aldosivi en un duelo directo por la permanencia. Una verdadera final en la que no hay margen para el error: el que gana respira, el que pierde se hunde.
El reglamento del torneo agrega un condimento más a esta trama de tensión. En su artículo 26, la competencia establece que “en caso de que un club se encuentre en zona de descenso o deba disputar un desempate para definir descensos, no podrá disputar las instancias finales”. Es decir, aunque San Martín se clasifique deportivamente, quedará automáticamente fuera de los playoffs si termina comprometido en la lucha por no bajar.
El Santo, que soñaba con cerrar el año peleando por el título, podría ver ese sueño esfumarse si el promedio le juega una mala pasada. En San Juan, todos hacen cuentas y el partido con el Tiburón se vive como una verdadera final por la vida.
De un extremo al otro, San Martín se juega todo en 90 minutos: el pase a los playoffs o el descenso.