El Tribunal de Disciplina de la AFA volvió a dejar en claro que la línea será rígida para quienes crucen los límites dentro de la cancha… y también fuera de ella. En una resolución pesada para cerrar la semana, el organismo aplicó sanciones de cuatro partidos a Guido Carrillo, delantero de Estudiantes, y al entrenador de Independiente Rivadavia, Alfredo Berti, protagonistas de dos episodios que encendieron la polémica en el fútbol argentino.
El caso de Carrillo sorprendió incluso dentro del propio club. El atacante recibió la pena máxima después del codazo sin pelota que le propinó a Joaquín Laso durante la derrota frente a Tigre. La acción, detectada a través del VAR por Daniel Zamora, dejó expuesto el golpe y derivó en una expulsión automática. Con cuatro fechas encima, Carrillo solo podría volver a jugar este año si Estudiantes llega a la final del Clausura, aunque desde La Plata no descartan apelar.
La situación de Berti, en cambio, era un expediente cargado desde el primer minuto. El entrenador explotó contra el árbitro tras su expulsión en la Copa Argentina y dejó una serie de insultos y amenazas que quedaron reflejadas en el informe. Entre gritos, desafíos y frases como “te voy a ir a buscar a tu casa”, el DT cruzó todos los límites y terminó recibiendo una sanción ejemplificadora. Como la Lepra ya quedó fuera de la pelea, deberá cumplir la suspensión en el arranque de la próxima temporada.
Las decisiones del Tribunal se dan en una fecha marcada por fallos que buscan enviar un mensaje hacia adentro: la vara será alta y los comportamientos violentos no pasarán inadvertidos. Para Estudiantes y para Independiente Rivadavia, las consecuencias ya se sienten.