Un rayo apagó la vida de Audun Grønvold, medallista olímpico noruego y figura emblemática del esquí, a los 49 años. La noticia, confirmada por la Federación Noruega de dicho deportes, sacudió al mundo deportivo internacional y dejó un vacío profundo en la comunidad de la disciplina. El deportista alcanzó la gloria en los Juegos Olímpicos de Vancouver 2010, falleció tras ser alcanzado por un rayo durante una excursión familiar a una cabaña, un suceso trágico e inusual que ha generado conmoción y tributo en Noruega y más allá.
El sábado anterior al martes 15 de julio, Audun Grønvold se encontraba junto a su familia disfrutando de unas vacaciones de verano en una cabaña, cuando un rayo lo alcanzó mientras estaban al aire libre. Según informó la Federación Noruega de Esquí, recibió atención médica de inmediato y fue trasladado rápidamente al hospital, donde permaneció bajo tratamiento por las graves lesiones sufridas. Sin embargo, pese a los esfuerzos médicos, el ex-esquiador falleció en la noche del martes al miércoles a causa de las heridas provocadas por el impacto eléctrico.
La información sobre el accidente y el posterior fallecimiento fue comunicada por la propia familia y confirmada por la federación. El hecho de que un deportista de élite, acostumbrado a los riesgos de la alta montaña y la velocidad, perdiera la vida en un accidente tan imprevisible como un rayo, ha impactado especialmente a la opinión pública y a la comunidad deportiva.
Reacciones y mensajes de la familia
La esposa de Grønvold, Kristin Tandberg Haugsjaa, compartió un emotivo mensaje de despedida a través de Facebook, donde relató el doloroso desenlace de lo que comenzó como unas vacaciones familiares. “Audun, mi gran amor y mi mejor amigo desde hace veinte años. Hoy nos dejaste. Lo que comenzó como unas hermosas vacaciones de verano terminó el sábado pasado, cuando te alcanzó un rayo mientras estábamos afuera, junto a nuestra cabaña”, escribió, según recogió la prensa noruega.
En su mensaje, la esposa del medallista olímpico también detalló que, aunque Grønvold recibió atención médica rápidamente y fue llevado al hospital, no logró superar las heridas. “Aunque recibiste atención rápidamente y te llevaron al hospital, falleciste en la noche del martes al miércoles a causa de tus heridas”, expresó. La familia, compuesta por la esposa y sus tres hijos, Sanna, Selma y William, enfrenta ahora la pérdida de un esposo y padre, a quien recordarán siempre en su corazón. “El vacío que dejas es inmenso. Siempre estarás con nosotros”, concluyó.
Reacciones de la comunidad deportiva
El fallecimiento de Audun Grønvold generó una ola de reacciones en la comunidad del esquí noruego e internacional. Kjetil André Aamodt, leyenda del esquí alpino y amigo cercano del fallecido, expresó su pesar en declaraciones recogidas por la emisora NRK: “Es simplemente una tragedia terrible y una noticia triste”. Aamodt, quien compartió equipo y amistad con Grønvold, lo describió como “una persona íntegra, un apasionado del deporte y un gran compañero”, según declaraciones a VG.
La Federación Noruega de Esquí, a través de un comunicado oficial, lamentó profundamente la pérdida de quien fuera no solo un atleta destacado, sino también un referente humano y profesional. “Como compañero de equipo, entrenador, colega y amigo dejó una huella profunda en el esquí. Nuestros pensamientos están con la familia de Audun, sus amigos y todos los que lo quisieron”, señaló la entidad.
Claus Johan Ryste, director deportivo de la federación, también se sumó a los mensajes de condolencia, subrayando el impacto de Grønvold en el desarrollo del esquí noruego. Por su parte, Tove Moe Dyrhaug, presidenta de la Federación Noruega de Esquí, destacó la relevancia de la figura del deportista: “El esquí noruego ha perdido a una figura destacada, que significó mucho para las comunidades de esquí alpino y freestyle”, declaró Dyrhaug, según la información publicada por la federación.
Trayectoria y logros deportivos de Grønvold
Nacido en Hamar, Audun Grønvold inició su carrera deportiva como esquiador alpino, disciplina en la que llegó a ser campeón noruego. Su trayectoria dio un giro en 2004, cuando decidió incursionar en el ski cross, una modalidad de esquí freestyle que combina velocidad, saltos y maniobras técnicas. Se convirtió en uno de los pioneros de esta disciplina en Noruega y rápidamente cosechó éxitos internacionales.
En 2005, obtuvo la medalla de bronce en el Campeonato Mundial de ski cross en Ruka, y en 2007 se consagró campeón de la Copa del Mundo de la especialidad, logrando victorias en las pruebas de Flaine y Les
Contamines. Su mayor logro llegó en los Juegos Olímpicos de Invierno de Vancouver 2010, donde conquistó la medalla de bronce en el debut olímpico del ski cross.
Tras su retiro de la competición, mantuvo una estrecha relación con el esquí noruego. Se desempeñó como entrenador del equipo nacional, integró el comité directivo de la federación y trabajó como comentarista deportivo, transmitiendo su experiencia y pasión por el deporte a nuevas generaciones de esquiadores.