EDITORIAL RIONEGRINA
El veto y la excusa para pasar viejas facturas
El diputado Domingo se abstuvo en la votación por la ley de Movilidad Jubilatoria para darle "gobernabilidad" a Milei.El único de los diputados rionegrinos que se abstuvo de fijar posición en relación al veto del presidente Javier Milei a la Ley de Movilidad Jubilatoria, fue Agustín Domingo. Lo justificó como un gesto para la "gobernabilidad". Sin embargo esa maniobra despertó la bronca de integrantes de su mismo partido, quienes apoyaron la iniciativa para que concurra al Deliberante de Bariloche a dar explicaciones, una maniobra que refleja la falta de acuerdos internos en el partido del gobierno provincial en la ciudad con el padrón más abultado.
No caben dudas que Domingo es un soldado del gobernador Alberto Weretilneck. Ya tuvo su papel protagónico en los primeros meses de la gestión del libertario y la discusión por la ley Bases. En cada una de las votaciones, el representante de Juntos obedeció a los intereses del cipoleño en Buenos Aires. Y esta semana no hizo ni más ni menos que respetar el mandato que llegó desde Viedma. Los diputados del Pro, Aníbal Tortoriello y Sergio Capozzi, junto con la libertaria Lorena Villaverde, votaron a favor de la decisión del presidente. En tanto que Martín Soria, votó en contra.
La abstención de Domingo, dejó al desnudo una grieta profunda dentro de Juntos. Los concejales del partido del gobierno provincial no dejaron pasar la oportunidad de marcarle la cancha al poder provincial y se sumaron al pedido de la peronista Julieta Wallace (Integrando Bariloche), y votaron a favor del proyecto de declaración para que el diputado Nacional vaya a dar explicaciones al recinto.
No son nuevos los cuestionamientos de los concejales Natalia Almonacid, alineada al sector del ex ministro y actual legislador Carlos Valeri y Juan Pablo Ferrari. Este último llegó a "pincharla" en un asado de Juntos cuando le cuestionó la representatividad a Domingo y casi se fueron a las manos. Lo acusan al ex rugbier roquense de cogobernar con el intendente Walter Cortés y no ser oposición.
Aunque Domingo no tiene obligación de dar explicaciones de sus votos, está demostrado que luego de la pésima elección en Bariloche, por el capricho de Arabela Carreras de ser candidata a intendenta, dejó heridas que no cicatrizan. Por el momento, el gobernador permanece al margen. Está al tanto pero prefiere esperar. "En su momento le levantará la mano al vencedor y reordenará la tropa", indicó una fuente cercana al gobernador. Además agregó un dato determinante: "La relación con Cortés es buena, no es el momento de confrontar. Igual que con María Emilia Soria".
La misión de escuchar y hacerle llegar las quejas al gobernador es el reubicado ministro Federico Lutz, quien entregó la cartera de Gobierno al cipoleño Fabián Gatti y ahora está al frente del novedoso Ministerio de Modernización. Se espera también que Weretilneck defina al nuevo secretario de Turismo, que deberá llegar desde Bariloche y a se verán señales por qué sector se inclina en la pelea interna.
Otro cargo que aún no puede reemplazar es el que dejó vacante Ana Senesi. La idea fue encontrar un nombre rápidamente, pero todas las respuestas fueron negativas. Nadie quiere asumir en un ambiente de crisis en los hospitales, sin insumos, con falencias en la atención y la falta de profesionales. Por el momento, está a cargo es el titular de Hacienda, Guillermo Sánchez.
Un rumor que circuló es que el contador continúe al frente y que su lugar en Hacienda sea ocupado por Alejandro Palmieri. Sin embargo esta versión fue desmentida por operadores cercanos al gobernador. También que sea al revés, con el ex alero de Deportivo Roca al frente de Salud. Aunque la intención parece ser la de nombrar un especialista en números y no alguien que pueda definir políticas sanitarias. Sin embargo, la decisión es tan difícil que obligó a Weretilneck a evitar a los periodistas luego de la ceremonia de jura de los nuevos funcionarios. Por ahora, hay que seguir esperando.