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Sábado 20 de Diciembre, Neuquén, Argentina
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Weretilneck logró la foto: pasó el Presupuesto, pero siguen los cuestionamientos

La Legislatura aprobó el Presupuesto 2026 sin votos en contra, pero detrás de la foto perfecta quedaron pases de facturas, un pedido de unidad urgente y aliados con hambre de poder.

Sabado, 20 de diciembre de 2025 a las 13:56
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La Legislatura de Río Negro aprobó por unanimidad el Presupuesto 2026 y el paquete fiscal, y el oficialismo consiguió la foto que necesitaba para cerrar el año. El gobernador Alberto Weretilneck y su operador, Facundo López, se mostraron al frente de una escena prolija, ordenada y sin fisuras. Pero fue apenas eso: una postal. Detrás del aplauso unánime se esconde una trama de internas, pases de factura, ministerios en la mira, intendentes desbocados y aliados que ya se prueban el traje de ministros. Todo mientras la provincia siente el ajuste nacional, la oposición grita recortes y nuevamente la diputada libertaria Lorena Villaverde involucrada en una causa judicial.

Tras la derrota electoral, el gobierno provincial necesitaba cerrar el año con un triunfo. La unanimidad es el resultado esperado. En cuanto a las formas, Weretilneck se cargó al hombro la negociación y logró que todos los bloques acompañaran un Presupuesto que proyecta gastos por más de $2,9 billones, un 38% más que el año anterior, y un superávit anunciado de casi $15 mil millones. López, jefe del bloque oficialista, fue el encargado de bajar el martillo con un discurso que buscó instalar la idea de una “provincia que resiste” frente al retiro del Estado nacional.

Pero la unanimidad fue una foto. La oposición dejó constancia de críticas durísimas: subejecución en Salud y Educación, crecimiento sin control de la planta estatal y endeudamiento para tapar agujeros. En la comisión previa del lunes, como nunca, todos los ministros fueron a defender el proyecto enviado por el Ejecutivo. Los rumores de cambios en el gabinete ya están instalados. Sólo falta saber quiénes se van. Nadie quiere integrar esa lista. El único confirmado que se alejará es el titular de Gobierno, Fabián Gatti que se jubila.

El martes, en el casino de Viedma, Weretilneck reunió a su tropa y el consultor Derek Hampton no vino a acariciar egos, aunque expuso una situación tan real como dura: “Si La Libertad Avanza ponía un un florero de candidato en Río Negro, ganaba igual”. Conclusión, una elección que se nacionalizó y la gestión de Juntos cayó en la grieta. Pero no quitó responsabilidades: ministerios que funcionan como oficinas de escritorio, funcionarios que no pisan el territorio y Salud como el área que muestra lo peor del tercer mandato del cipoleño. El mensaje, sin embargo, fue clarísimo: desde febrero hay rearmado. Y no será indoloro. 

Intendentes sueltos y aliados con apetito

Se sabe que Weretilneck abrirá el gobierno hacia los aliados. Pero aparecen las críticas hacia adentro. Es que los intendentes que acompañaron el 26 de octubre, aprovecharon la obra pública provincial para inflar sus gestiones municipales. Lo plantearon. El gobernador escuchó. 

En paralelo, los aliados de la CC-ARI ya hacen números. El roquense Javier Acevedo y la viedmense Roberta Scavo levantaron la mano para el Presupuesto, y ayudaron en la rosca. Saben que, en política, los votos hoy se negocian mañana en cargos. Ya se habla de la llegada de alguien de esa fuerza al gabinete. 

Los rionegrinos en el Congreso

Mientras sus compañeros en la Legislatura denunciaban recortes del gobierno provincial, en el Congreso, Martín Soria puso ejemplos en cifras al impacto del ajuste libertario en Río Negro. Denunció que dos artículos de la reforma laboral impulsada por Javier Milei le quitan a la provincia 110 millones de dólares, casi una masa salarial mensual completa. Un dato.

También, el ahora libertario Aníbal Tortoriello fue otro foco de ruido. No estuvo cuando el quórum pendía de un hilo, pero apareció justo a tiempo para votar. Versiones cruzadas hablaron de vacaciones en el exterior y regreso exprés para apretar el botón. Nadie lo confirmó. Nadie lo negó. La sospecha quedó instalada. También el enojo de la Casa Rosada y el recuerdo de los viejos mensajes que advertían este tipo de actitudes personalistas del empresario de Cipolletti.

Y como sucede casi todas las semanas, nuevamente Lorena Villaverde quedó expuesta en una causa judicial. Otra vez. Otro escándalo. Un juez de Bariloche ordenó al área de liquidaciones del Congreso, embargar su sueldo y aguinaldo por más de 40,5 millones de pesos en una causa por incumplimiento en la venta de terrenos en el loteo Tajamar de Las Grutas. No es un hecho aislado: ya arrastra otras denuncias por operaciones inmobiliarias que nunca llegaron a destino. Y prometen que habrá más.

Otro expuesto fue el barilochense Sergio Capozzi, ahora del bloque Provincias Unidasoptó por la abstención en la votación general del Presupuesto y en el Capítulo XII, mientras que estuvo ausente en varias votaciones particulares. Sin embargo, sí votó afirmativamente la Ley de Principio de Inocencia Fiscal. Hay que recordar que se fue del PRO hace un par de semanas para no tener que acompañar a Villaverde y Tortoriello en la defensa de los proyectos de Milei.

Final abierto y tinta roja

Así las cosas, el año se termina, pero la rosca política no se toma vacaciones. La unanimidad le dio oxígeno a Weretilneck, aunque no alcanzó para sellar las grietas: el gobernador necesita reordenar su tropa,activar áreas desdibujadas y bajar a tierra a dirigentes que juegan por cuenta propia. La oposición tampoco canta victoria: mientras el PJ declama unidad, varios intendentes coquetean con el gobierno provincial que les financia las gestiones y les mantiene la obra pública encendida. Y en La Libertad Avanza, el discurso de la nueva política choca contra una realidad incómoda, con referentes que no logran esquivar escándalos ni controversias judiciales.

En ese clima, Río Negro llega a las Fiestas con la política al rojo vivo. Tal vez Papá Noel no traiga regalos, pero a nuestros políticos bien podría dejarle un paquete con menos rosca y más gestión. Porque si algo queda claro es que la paciencia social se agota y a varios, no los va a salvar ni la foto ni el arbolito.

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