Hay momentos televisivos que no necesitan gritos ni peleas para hacer ruido, y Pampita brindó una clase maestra de eso. En medio de una charla inocente, la conductora soltó una de esas frases con sonrisa incluida que se clavan como dardos disfrazados de humor. La destinataria fue Evangelina Anderson, su compañera en Los 8 Escalones, y el video se volvió viral en minutos.
Todo se disparó cuando Evangelina Anderson comenzó a contar anécdotas de su etapa en Inglaterra, recordando cómo nació su amistad con Karina “La Princesita” en los años en que sus parejas —Martín Demichelis y el Kun Agüero— coincidían en el Manchester City. Era un momento distendido, casi nostálgico, hasta que Pampita interrumpió con tono juguetón pero punzante: “¿Y qué hacen las botineras?”.
Eva intentó seguirle el juego sin perder la compostura. “Botineamos”, respondió entre risas, intentando darle un giro divertido a la situación. Pero la modelo no se quedó ahí y remató con una frase que, aunque dicha entre carcajadas, dejó una sensación de incomodidad en el aire: “A mucha honra chicas, con el laburo que es botinear, cambian a los chicos de cole...”.
Esa última línea fue suficiente para desatar una tormenta. En segundos, el video circuló en redes sociales con interpretaciones cruzadas. Para algunos fue una broma interna; para otros, un comentario cargado de intención. La mención a los “cambios de colegio” avivó las sospechas de que la alusión podía estar dirigida a la China Suárez, quien recientemente volvió a instalarse en Turquía junto a Mauro Icardi y tuvo que reorganizar la rutina familiar con sus hijos.
Las coincidencias hicieron el resto. El público recordó inmediatamente la larga historia de tensiones entre Pampita y la actriz, y las especulaciones se multiplicaron. La conductora, fiel a su estilo, no aclaró nada. Sonrió, siguió el programa y dejó que las redes hicieran el trabajo por ella.
Mientras tanto, el debate escaló en otros programas. Yanina Latorre tomó la palabra desde Sálvese quien pueda y salió a defender el “oficio” de las botineras. “Es como cualquier trabajo de ama de casa, nada más que la botinera tiene plata y hay otras que no tienen un mango”, lanzó con ironía. Y, con su estilo directo, agregó: “Mete a todas las botineras, que hable directamente de la China Suárez y listo”.
Así, un comentario improvisado terminó reavivando viejas rivalidades, en un juego que Pampita conoce de memoria: decir poco, insinuar mucho y lograr que todo el país hable de ella sin levantar la voz.