El estreno de los Martín Fierro de Streaming llegó con la impronta clásica de los premios locales: nada puede suceder sin discusiones previas. A horas de hacerse públicas las ternas, ya se instaló un clima cargado de quejas, rispideces y declaraciones cruzadas que se multiplicaron en redes sociales. Ni siquiera la intención de reconocer el trabajo en las plataformas digitales logró esquivar los viejos hábitos de la televisión.
Uno de los primeros en manifestar su incomodidad fue Nico Occhiato, quien se mostró molesto por no haber sido convocado al anuncio oficial de las nominaciones, instancia que sí incluyó a otros canales del ámbito digital. El fundador de Luzu TV inicialmente apuntó contra la organización, pero con el correr de las horas eligió bajar el tono a su reclamo.
“Ya está, ayer salieron las nominaciones, están buenas y la verdad es que no quiero más escándalo”, expresó Nico Occhiato frente a las cámaras, dejando ver que intenta poner un freno al conflicto. También admitió que esperaba figurar entre los ternados y reconoció sin vueltas que siempre resulta gratificante entrar en consideración dentro de un premio de este estilo.
Mientras los fanáticos de los principales canales de streaming continúan discutiendo en redes por las ausencias que consideran incomprensibles, Nico Occhiato llamó a la calma y se desmarcó de la indignación generalizada: “Creo que las que están son las correctas, están bien”, aclaró, sorprendiendo con una postura más conciliadora.
Sin embargo, el clima volvió a encenderse cuando Luis Ventura, presidente de APTRA, mostró su enojo asegurando que no le habían enseñado previamente el listado final de candidatos. Con su clásico tono explosivo, lanzó advertencias y dejó en duda su continuidad en la ceremonia si la situación no se aclaraba.
Consultado sobre esta reacción, Nico Occhiato no perdió el humor y lanzó una chicana que rápidamente se volvió tendencia: “Ventura hinchado las pel*** me divierte mucho. Es un tipazo, que lo levante o no, que haga lo que quiera”, respondió entre risas, restándole dramatismo a la furia del dirigente.
Para sumar un capítulo más a la novela, Migue Granados también metió bocado desde su cuenta de X, ironizando sobre la polémica y alentando el tono jocoso que ya circulaba entre los seguidores del streaming. Así, lo que prometía ser una fiesta del nuevo entretenimiento argentino terminó derivando en un show paralelo de egos, reclamos y bromas filosas.
Aun con este panorama, Nico Occhiato aseguró que no quiere seguir alimentando el conflicto y que todavía no decidió si participará del evento que se realizará el próximo 14 de diciembre. Por ahora, en el universo del stream, la alfombra roja parece estar más caliente que nunca. ¿Se apaciguarán las aguas o seguirá el show antes del show?
 
 