En medio de un clima personal convulsionado y apuntado por la opinión pública, la figura de Marcelo Tinelli volvió a situarse en el centro de la escena. Esta vez, no por el conflicto familiar desatado tras el recordado posteo de su hija Juanita, sino por las versiones que comenzaron a circular sobre su posible futuro laboral. Fue Ángel de Brito quien aportó luz al tema al revelar cuál es el verdadero objetivo profesional del conductor para el próximo año.
La charla se dio en LAM, donde Ángel de Brito conversaba con Gabriel Fernández, el histórico “productor enmascarado” de ShowMatch. En medio del intercambio, surgió la pregunta sobre las supuestas ofertas que Marcelo Tinelli habría recibido desde el exterior. Desde Uruguay, trascendió que lo tentarían para comandar una nueva edición de Gran Hermano; mientras que, desde Chile, la propuesta apuntaría a ponerlo al frente de un formato de baile similar al Bailando, un terreno donde siempre se movió con comodidad.
Sin embargo, lejos de alimentar expectativas, De Brito decidió derribar todas las especulaciones. Con firmeza, aseguró que Marcelo Tinelli no aceptará ninguna de esas alternativas internacionales. Ni la televisión uruguaya ni la chilena lograrían tentarlo, más allá del interés que ambos mercados efectivamente habrían mostrado por incorporarlo.
“Lamento pincharles el globo a todos. Marcelo Tinelli no va a ir a Uruguay, no va a ir a Chile”, sentenció Ángel de Brito ante la sorpresa de las angelitas. Fue entonces cuando reveló la auténtica meta del conductor: su deseo es mantenerse activo en la televisión argentina durante el 2026. Una aspiración que, como él mismo aclaró, dependerá de muchos factores aún inciertos.
La situación laboral del animador se mezcla inevitablemente con su presente familiar. En las últimas semanas crecieron versiones que apuntaban a un quiebre con Juanita Tinelli, quien incluso habría llegado a bloquearlo tras exponer tensiones íntimas en redes. También circularon rumores sobre distancias con sus otras hijas, alimentando la idea de un escenario aún más complejo.
Pese a todo, Marcelo Tinelli mantuvo intacto su gesto característico de cada año: dedicarle un saludo por el cumpleaños a su hija menor. Compartió un video lleno de recuerdos y palabras de profundo cariño, que muchos interpretaron como un intento de recomponer el vínculo. La reacción de la joven generó sorpresa, y para algunos significó un guiño hacia una posible reconciliación.
En el posteo, el animador expresó un mensaje cargado de emoción, repasando momentos desde la infancia de Juanita hasta hoy. Sin mencionar tensiones ni reproches, habló de amor, de orgullo y del paso del tiempo, dejando a la vista que, más allá de los conflictos, sigue deseando que su hogar encuentre calma.
Así, entre versiones cruzadas, afectos que buscan reubicarse y movimientos profesionales por definir, el 2026 se perfila como un año clave para Marcelo Tinelli. Mientras tanto, la puerta que más interés le despierta continúa siendo la televisión argentina.