El casamiento de José Alperovich y Marianela Mirra en Puerto Madero, previsto como un festejo discreto y sin excesos, terminó convirtiéndose en un episodio sanitario inesperado. A horas de haber dado el “sí”, el exgobernador tucumano debió ser internado de urgencia en el Hospital Italiano, donde los médicos decidieron intervenirlo rápidamente por una complicación gastrointestinal que se agravó con el correr de las horas.
Según trascendió en Buena semana (TN), Guillermo Lobo explicó que Alperovich comenzó con molestias abdominales que derivaron en una consulta médica inmediata. Los síntomas coincidían con un cuadro agudo que podría incluir una apendicitis o afecciones intestinales similares, motivo por el cual se activó un protocolo urgente y se resolvió su traslado al reconocido sanatorio porteño.
Aunque el diagnóstico definitivo aún no fue difundido, el periodista remarcó que todo apunta a una intervención por síntomas compatibles con apendicitis. En un principio, el círculo íntimo del dirigente creyó que el malestar podía tener relación con los nervios propios del casamiento, su situación judicial o incluso algo que hubiera ingerido durante la fiesta. Sin embargo, la evolución del cuadro descartó esa posibilidad.
En paralelo, Ángel de Brito aportó su propia información al revelar una imagen de Marianela Mirra en la sala de espera del hospital, visiblemente preocupada, y confirmando que la operación a la que fue sometido Alperovich correspondía a una afección intestinal que requería atención inmediata.
La situación cobra un matiz particular debido a que el exgobernador cumple prisión domiciliaria por su condena a 16 años de prisión. De Brito señaló que cualquier movimiento del imputado debe notificarse formalmente en la causa para que la víctima esté al tanto, trámite que, hasta el momento, no se habría concretado.
El episodio irrumpió justo después del casamiento celebrado en el mismo edificio donde Alperovich cumple su condena. Allí, Farándula Show registró la postal de Mirra con un vestido blanco strapless, peinado recogido y joyería brillante, una imagen que recorrió las redes antes de conocerse el cuadro clínico.
Horas antes de la celebración, Mirra había hablado con Pamela David y aclarado que la boda estaba planificada desde hacía tiempo. Además, insistió en que las versiones sobre ostentación y lujo no tenían sustento y que afectaban a la pareja. El giro que tomó la jornada no hizo más que sumar un nuevo capítulo a una historia ya atravesada por la polémica.