En la cuarta semana de septiembre de 2025, la inflación en el rubro de Alimentos y Bebidas mostró una desaceleración al registrar un aumento semanal del 0,9%, según el último informe de la consultora LCG. Este dato representa una caída significativa respecto al incremento del 1,6% observado en la semana anterior.
El estudio semanal, que monitorea la evolución de precios de productos de consumo masivo, destacó que la inflación promedio mensual en las últimas cuatro semanas se redujo a un 1%, aunque la comparación 'punta a punta' —es decir, entre el inicio y el final del mes— mostró un aumento del 2,3%. En palabras del informe, “la inflación promedio de las últimas cuatro semanas desaceleró a 1% mensual (-0,2 puntos porcentuales respecto de la semana previa), pero la medición contra las puntas trepó arriba del 2%”.
Respecto a la dispersión de precios, se observó una leve reducción en comparación con la tercera semana de septiembre. La proporción de productos sin variación en sus precios disminuyó en siete puntos porcentuales, distribuyéndose equitativamente entre aumentos y bajas. Así, aunque la cantidad de bienes con incrementos se mantuvo alta, su concentración fue menor que en la semana anterior.
En cuanto a los rubros con mayores incrementos, las verduras encabezaron la lista con una suba semanal del 4,7%. Las frutas también tuvieron un incremento destacado del 3%, y ambos grupos explicaron más de la mitad de la inflación semanal. Otros productos que aumentaron significativamente fueron los lácteos y huevos, con un alza del 2,6%, y las carnes, que se encarecieron un 2%. Estos sectores aportaron conjuntamente más de tres cuartas partes de la inflación registrada en alimentos durante ese periodo.
Qué dice el informe
El informe puntualiza que “los aumentos de frutas y verduras explicaron el 56% de la inflación de la semana”, evidenciando el peso que tienen estos productos frescos en la dinámica de precios a corto plazo. Por otro lado, algunos rubros mostraron descensos, como los condimentos y otros productos alimenticios, que bajaron un 1,4%, y el grupo de azúcar, miel, dulces y cacao, que retrocedió un 1%. Estas bajas ayudaron a moderar el promedio general, aunque no lograron revertir la tendencia alcista.
El análisis mensual presenta un panorama distinto. Al considerar las últimas cuatro semanas, LCG identificó que las frutas representaron aproximadamente un cuarto de la inflación mensual. Además, los productos de panificación, cereales y pastas, junto con las carnes, concentraron cerca del 50% del aumento total en ese periodo.
Durante estas cuatro semanas, las frutas acumularon un incremento del 5,6%, y los aceites avanzaron un 5,2%, consolidándose como los segmentos con mayores presiones inflacionarias. También se registraron alzas en panificados (2%) y carnes (0,7%). En contraste, las verduras presentaron una caída promedio del 1,9%, lo que ayudó a mitigar parte del impacto inflacionario.
Otro aspecto relevante es la mayor dispersión de aumentos. La reducción en la proporción de productos sin variación refleja que las subas se extendieron a una mayor cantidad de artículos, aunque con magnitudes heterogéneas. Según LCG, esta tendencia muestra una dispersión moderada en el comportamiento de precios, con incrementos puntuales en rubros de peso significativo en la canasta familiar.
En definitiva, si bien la inflación de alimentos experimentó una desaceleración en la última semana de septiembre, persisten presiones inflacionarias en productos sensibles como frutas, verduras y lácteos, que impactan directamente en el gasto cotidiano de los hogares y explican buena parte de la variación mensual.