Un fuerte temporal afectó a la Ciudad de Buenos Aires y el conurbano luego de una jornada marcada por el calor extremo, con una sensación térmica que llegó a los 34 grados. La llegada de las lluvias intensas trajo algo de alivio en la temperatura, que descendió hasta los 22 grados, pero también dejó importantes complicaciones en el suministro eléctrico y en el transporte aéreo.
Según datos oficiales, más de 60 mil usuarios se quedaron sin luz como consecuencia del calor y las tormentas. De acuerdo al Ente Regulador de la Electricidad, Edenor registró más de 64 mil clientes afectados, mientras que Edesur reportó más de 7.500 cortes en su área de concesión. En distintos puntos del AMBA se multiplicaron los reclamos por la falta de energía en medio de las lluvias.
El temporal se sintió con fuerza en varios barrios porteños, como Colegiales, Villa Urquiza, Balvanera, Constitución, Monserrat, Villa Crespo y Liniers, y también en amplias zonas del sur, norte y oeste del conurbano bonaerense. En algunos sectores hubo caída de granizo, calles anegadas y filtraciones, como ocurrió en el shopping Unicenter, donde se registraron problemas en el tercer piso del complejo.
La tormenta también impactó de lleno en el transporte aéreo. En el Aeroparque Jorge Newbery se registraron demoras y cancelaciones de vuelos debido a los fuertes vientos y las precipitaciones. La situación obligó a activar los protocolos de seguridad aeroportuaria, que impiden la carga de combustible y el movimiento de aeronaves en pista mientras persisten condiciones climáticas adversas.
Desde el Servicio Meteorológico Nacional indicaron que, si bien el tiempo podría mostrar algunas mejoras con el correr de las horas, se esperan nuevos chaparrones aislados durante la tarde y la noche del miércoles 24 de diciembre, por lo que se recomienda mantenerse atentos a las actualizaciones oficiales..