LA NENA TENÍA APENAS 3 AÑOS
Termina el juicio por el femicidio infantil de Nahiara
Este viernes son los alegatos finales y luego el jurado popular deberá emitir un veredicto por separado para los dos acusados.El juicio por el femicidio infantil de Nahiara Soledad Miranda entró en su etapa final. Los últimos testigos que declararon fueron los que aportó la defensa del padrastro Carlos Erbín y apuntaron a los maltratos reiterados de la otra acusada, Valeria Miranda contra su hija. Aunque varios de ellos eran familiares del hombre acusado de haber golpeado en la cabeza y causarle la conmoción cerebral que terminó en la muerte de la niña de sólo 3 años.
Finalizó la etapa de testimonios en la que los jurados populares pudieron escuchar las declaraciones y supieron como fueron producidas las pruebas acompañadas en el expediente por el cual se juzga a Erbín y a Miranda por la muerte de la niña en un paraje cercano a Los Menucos, en abril del año pasado.
Hoy está previsto que las partes presenten sus alegatos y luego los 12 miembros pasarán a deliberar. A él se lo acusa de "lesiones graves y leves agravadas por haber sido cometidas con violencia de género, en concurso real con femicidio"; en tanto que a ella de sólo 21 años, "lesiones graves y leves agravadas por el vínculo, en concurso real con homicidio calificado por el vínculo".
El jurado deberá responder con su veredicto a dos preguntas centrales: si los hechos que fueron relatados en la acusación efectivamente existieron y si el hombre y la mujer que están acusados por esos hechos fueron o no culpables de los delitos que se les atribuyen. El veredicto será individual respecto de cada uno de los imputada.
Los últimos testigos que declararon hicieron referencia a lo mal que la trataba la madre a la niña. Que además de estar sucia con la misma ropa y zapatillas chicas por las que "tenía los dedos encogidos", también aseguraron haberla visto pegarle permanentemente. A su vez, todos recordaron lo bien que Erbín trataba a la pequeña, pese a no ser su hija. Y hasta olvidaron los motivos por los cuales este puestero había sido condenado hace unos años por apuñalar a un vecino de otro campo, a quien le provocó heridas.
Sin embargo la madre del acusado expresó que "nunca la vi golpear a la nena", aunque si recordó que una vez acompañó a Nahiara al baño, vio que estaba raspada y que ella le dijo "mamá me arrastró".