La tranquilidad de una comisaría un domingo cerca del mediodía se vio alterada con gritos, golpes y hasta llamas desde un calabozo. Todo fue un caos que terminó con tres policías heridos, incluido el comisario de la unidad. Y el detonante de todo fue una mujer que intentaba hacer una denuncia por abuso sexual.
El hecho sucedió en la Comisaría Departamental de 25 Mayo, en La Pampa, al límite con Catriel. Cerca de las 11:50 del domingo, una mujer se presentó con tres amigas con intenciones de denunciar a un hombre que la había abusado en un conocido bar de la localidad. El manual de procedimientos indica que se debe convocar al personal de la Unidad Funcional de Género, Niñez y Adolescencia, al tiempo que también ubicaron al presunto abusador y lo detuvieron.
Durante el procedimiento, las amigas empezaron a insultar y agredir al personal. Cuando intentaron calmarla, empezaron a arrojar y romper todo lo que encontraron a su paso. Incluso, golpearon a una uniformada. El comisario también quiso intervenir, pero las mujeres -totalmente fuera de sí- no respetaron la jerarquía y también le pegaron. Tras el arribo de más personal, dos de las mujeres terminaron dentro de una celda de la comisaría.
Por su parte, la víctima debió ser trasladada en una ambulancia del hospital para ser revisada por los médicos para constatar el presunto abuso sexual. Luego, tuvo que regresar a la unidad policial para terminar de formalizar la denuncia.
Ya cuando se pensaba que la calma había vuelto, otra vez comenzaron a escucharse gritos y luego las lenguas de fuego comenzaron a asomarse en el mismo sector. Pero las responsables no fueron las amigas que continuaban detenidas, sino que dos de los hijos de la víctima, que permanecían detenidos por otra causa, iniciaron una protesta que terminó con los policías apagando el fuego.
Por lo sucedido, tomó intervención el fiscal Faundo Rossi, que ordenó liberar a las dos mujeres, aunque continúan ligadas a una causa que se caratuló como "lesiones, daño y atentado y resistencia a la autoridad". En tanto que los hijos de la víctima deberán hacerse responsable de "daño al Estado provincial". Por último, tramitó el legajo por el abuso sexual de la mujer.