Un hombre que se encontraba prófugo de la justicia bonaerense fue detenido en San Antonio Oeste por personal policial, tras confirmarse que tenía una condena firme de 26 años de prisión por abuso sexual agravado. El operativo se concretó este fin de semana en una vivienda de la localidad rionegrina, luego de un trabajo de seguimiento e inteligencia que permitió localizar al sujeto, oriundo de Bahía Blanca.
El procedimiento se desarrolló con extrema cautela, en coordinación con fuerzas provinciales y federales, y permitió avanzar en el cumplimiento de una sentencia judicial que había quedado pendiente por la fuga del condenado. La captura se realizó sin incidentes, y el hombre fue puesto inmediatamente a disposición del Juzgado de Ejecución Penal correspondiente, que ordenó su traslado a una unidad penitenciaria para el cumplimiento efectivo de la pena.
La causa por la que el detenido había sido condenado incluye múltiples hechos de abuso sexual agravado, y fue tramitada por el Tribunal Oral en lo Criminal N°3 de Bahía Blanca, que dictó una sentencia firme de 26 años de prisión. El condenado había logrado evadir la justicia y ocultarse en territorio rionegrino, lo que motivó una investigación interjurisdiccional para dar con su paradero. Según se informó, el hombre se encontraba residiendo en una vivienda de San Antonio Oeste, donde mantenía un perfil bajo y evitaba circular por espacios públicos.
Las tareas de inteligencia incluyeron el análisis de movimientos, contactos y registros de actividad en la zona, lo que permitió establecer su ubicación con precisión. La detención fue ejecutada por personal de la Comisaría 10° de San Antonio Oeste, con apoyo de unidades especializadas, y se realizó en horas de la madrugada para evitar riesgos y garantizar la seguridad del procedimiento. El sujeto no ofreció resistencia y fue trasladado bajo custodia a una dependencia policial, donde se formalizó su situación judicial.
El detenido será trasladado a una unidad penitenciaria para cumplir la condena impuesta por la justicia bonaerense, en el contexto del proceso que incluye la revisión de sus antecedentes, condiciones de detención y medidas de seguridad. Las autoridades judiciales confirmaron que se trata de una sentencia firme, por lo que no existen instancias pendientes de apelación. El cumplimiento efectivo de la pena será supervisado por el Juzgado de Ejecución Penal.