La tragedia de la Ruta 22 sigue revelando una trama cada vez más oscura. Lo que comenzó como un choque brutal causado por la furia alcohólica y drogada de Axel Adrián “Chinito” Araneda, ahora se profundiza con el hallazgo de un verdadero arsenal dentro de la potente Volkswagen Amarok V6 y un posterior allanamiento en su chacra de Guerrico, que destapó aún más sombras sobre su vida.
Horas después de provocar la muerte de cuatro personas calcinadas, el Gabinete de Criminalística pudo requisar la camioneta y secuestró varios cuchillos, un machete y municiones de distintos calibres, un combo que descolocó por completo a los investigadores.
A eso se sumó una botella de vodka a medio tomar y una botella térmica, cuyo análisis en laboratorio terminó siendo determinante. Según confirmó la fiscal Celeste Benatti, en la audiencia de formulación de cargos, allí se detectaron rastros de metanfetaminas y drogas sintéticas, evidencia que le permitió reforzar su acusación. Al chocar a la Ford EcoSport, Araneda manejaba borracho, drogado y a más de 170 kilómetros por hora. Un cóctel letal. También tenía un millón de pesos en efectivo.
Sin embargo, se suman más agravantes. Teniendo en cuenta sus antecedentes y una rápida revisión de sus redes sociales, inmediatamente se gestionó una orden de allanamiento en la chacra de Guerrico, donde vive Araneda. Desde dónde subía fotos con armas y dólares, la Brigada de Investigaciones avanzó con una orden judicial.
La propiedad, ubicada entre la ruta Chica y el Canal Principal de Riego, conocida en el ambiente delictivo porque antes perteneció al “Negro” Gutiérrez, el padre del “Gitano” Gutiérrez, condenado por el crimen de Facundo Castillo. La historia de ese predio ya arrastraba su propia sombra, allí guardaba los autos envainados con cocaína que llegaban desde Buenos Aires y después vendía con los papeles truchos que le hacía un gestor roquense.
El allanamiento se realizó pocas horas después del choque. La Justicia intentó sorprender y evitar que la decena de soldaditos que se hizo presente en el lugar del choque, pueda limpiar la propiedad.
Qué secuestraron en Guerrico
Los policías realizaron un operativo minucioso que terminó con nuevos secuestros: varios dispositivos electrónicos, armas de fuego automáticas y otros elementos de interés para la causa. La línea de investigación ahora busca determinar si Araneda usaba esa chacra como base de operaciones y si su vida movida por excesos también estaba ligada a actividades más complejas.
Todos los dispositivos electrónicos secuestrados deberán ser abiertos y analizados por la OITEL También el celular iPhone de Araneda, el que desesperadamente manipulaba segundos después del choque, en vez de ayudar al único sobreviviente a rescatar a su familia, que era consumida por las llamas. También certificarán si la selfie publicada poco antes de chocar con la EcoSport, fue subida desde ese teléfono y la hora precisa. El uso del celular mientras manejaba es un agravante en la causa.
Traslado a la cárcel de Roca
Mientras tanto, desde el viernes Araneda sigue detenido en la Comisaría 3° de Roca, cumpliendo prisión preventiva. Su abogado, Michel Rischmann, solicitó que sea trasladado a la Unidad de Ejecución Penal N°2, alegando hacinamiento en los calabozos de las comisarías.
Pero fue tajante en un pedido: evitar que lo envíen a Bariloche, Viedma o Cipolletti, donde —según dijo— su vida correría peligro por viejas rencillas y deudas pendientes con internos alojados allí.
La causa continúa avanzando, y cada paso deja al descubierto que aquella madrugada de furia al volante fue apenas la punta del iceberg.