La presencia de un nuevo indicio desconcertó a los investigadores que buscan a los jubilados desaparecidos en Comodoro Rivadavia. En medio de los rastrillajes, efectivos policiales detectaron un olor “putrefacto” en una zona cercana a donde días atrás había sido hallada la camioneta en la que viajaban Pedro Kreder, de 79 años, y Juana Morales, de 69.
El hallazgo llamó la atención, ya que el sector ya había sido peritado, aunque ahora se amplió el radio de búsqueda. La zona incluye caminos próximos a las rutas 1 y 3, la playa de Restinga Alí, varios cañadones y la ladera de un cerro.
Allí, en los últimos días, se desplegó un operativo con equipos de distintas fuerzas. Además del trabajo terrestre, un dron sobrevoló un área de seis kilómetros, mientras que personal policial avanzó por tierra hacia el mar, cubriendo un recorrido de unos nueve kilómetros.
En los rastrillajes participaron miembros del Grupo Especial de Operaciones Policiales (GEOP), las divisiones de Búsqueda de Personas, Canes, Montada e Infantería, junto con bomberos de Trelew y Bahía Blanca. También intervino el Sistema Federal de Búsqueda de Personas Desaparecidas y Extraviadas.
Las tareas se concentraron en los puntos vinculados con las últimas señales del teléfono de Juana Morales, registradas en esa misma zona. Hasta el momento, no se informó sobre resultados concretos, pero los investigadores consideran que la detección del olor podría marcar un nuevo rumbo en la búsqueda.
La familia de los jubilados continúa a la espera de novedades, mientras las fuerzas mantienen los operativos activos en los alrededores de Comodoro Rivadavia