Con varios candidatos y precandidatos ya en carrera, el bloque de diputados provinciales de Juntos por el Cambio (JxC) presentó un proyecto para instaurar el debate público obligatorio entre todos y todas las aspirantes a convertirse en gobernador o gobernadora de Neuquén. Propusieron denominarlo “el debate público neuquino”.
De aprobarse, una vez oficializadas las listas, los candidatos y candidatas participarán de una audiencia destinada a acordar el reglamento, el lugar y fecha de realización del debate, así como también los temas a abordar. Si alguno falta se dejará la silla vacía, para hacer evidente su ausencia; además, el partido al que pertenezca deberá abonar una multa.
“El debate será transmitido en directo por todos los medios públicos televisivos, radiales y digitales en los que la provincia tenga participación. En las tandas publicitarias del debate en vivo, se suspenderán las propagandas de campaña electoral y/o publicidad oficial”, dice el proyecto que presentaron los diputados y diputadas César Gass, Ayelén Quiroga, Leticia Esteves y Luis Aquín.
En sus fundamentos indicaron que el debate público “fortalece la democracia, tornándola más abierta, y constituye un elemento esencial a la hora de facultar a la ciudadanía para tomar una decisión informada y fundada”. En ese sentido, aseguraron que el debate contribuye a conformar un espacio en el que los aspirantes a la gobernación deben brindar respuestas y explicaciones ante las observaciones, críticas y preguntas tanto de sus competidores como de moderadores imparciales.