Video: bocinazos contra el cobro del estacionamiento en San Martín de los Andes

Una larga caravana de vehículos con sus bocinas volvió a marcarle al intendente de San Martín de los Andes, que gran parte de la comunidad no acepta la imposición del estacionamiento medido. Los vecinos están movilizados contra la medida, y buscan la forma de recordarle al jefe comunal que no están de acuerdo.

Anoche llovía mucho en la localidad cordillerana, igual que la semana pasada cuando llenaron el salón municipal y se enfrentaron por primera vez por este tema que los divide, aunque parecer ser la segunda gran reacción comunitaria contra Saloniti. La primera fue en pandemia, cuando el municipio no autorizaba la apertura de los comercios y el sector privado se fundía. Aquella vez lograron su cometido, y bajo ciertas normas, volvieron a trabajar.

En esta nueva oportunidad, el final es abierto. El estacionamiento medido comienza a correr desde el lunes 30, con algunos beneficios para residentes y jubilados, pero los vecinos insisten que pagar por usar un espacio público no les garantiza el orden que el municipio asegura que va a lograr, que perjudicará a la ciudad como destino turístico, y que afecta la economía individual dado que esta medida se suma a la tasa vial ya vigente.

La Defensoría del Pueblo y el Ambiente, de San Martín de los Andes, hizo llegar alrededor de diez notas al municipio. La última, con el hecho consumado, fue el 24 de septiembre. Allí sugieren algunas modificaciones, dado que no es incumbencia del organismo impedir que la Ordenanza se aplique, excepto que "las políticas públicas afectan derechos de las personas, ya sean éstos de carácter subjetivo, colectivo o difuso", y además destacan aspectos poco claros de la norma.

La primera consideración importante que hace la Defensoría, es que "la delimitación de la zona de estacionamiento medido y pago, tal como ha sido pergeñada, no ha tenido en cuenta una adecuada ponderación de las características morfológicas de este valle acotado por laderas, lo que reduce las opciones de estacionamiento libre para el casco histórico".

Y lo que es más importante, desde el organismo señalan que "el diagrama actual limita el uso de espacios libres de estacionamiento medido y pago, a lo que contribuye la ausencia –al menos de momento– de sitios de aparcamiento privado (playas de estacionamiento). En otras palabras, se restringe la libertad de opción."

Estacionamiento medido en San Martín: los tres elementos contra su aplicación

Teniendo en cuenta que cualquier modificación puede afectar el contrato ya firmado, la Defensoría pondera tres elementos a los fines de alcanzar el objetivo planteado aquí:

• Los alcances del contrato y de la actual ecuación económica proyectada. En  otras palabras, no alterar sustancialmente las cuadras servidas con estacionamiento medido y pago, pero procurando una nueva configuración.
• Las limitaciones de espacio que “encierran” al contribuyente a pagar estacionamiento o, de lo contrario, a buscar sitios que, conforme se saturen las arterias contiguas al área de medido y pago, podrían implicar que los automovilistas se vean obligados a estacionar a una decena de cuadras de su eventual destino, siendo de considerar también las condiciones estacionales de otoños e inviernos. Esta situación podría verificarse especialmente por la porción Este del área delimitada, ya que las zonas libres deberían discurrir básicamente por avenida Koessler o calle Los Cipreses, siendo posible presumir la rápida saturación de las cuadras más próximas.
• El necesario y más importante ordenamiento del tránsito y la fluidez de rotaciones. No debe perderse de vista este objetivo, más allá del destino de la recaudación.

El documento enviado al Ejecutivo ofrece alternativas en el diseño del cuadrante de estacionamiento pago, haciendo notar que con las sugerencias aportadas "en la configuración actual, el estacionamiento medido y pago alcanza a 59 cuadras. En la configuración propuesta, comprende 62 cuadras. Pero si bien aumenta la cantidad de cuadras totales con estacionamiento medido y pago, se agregan al esquema actual cuatro transversales sin afectación, libres, siendo ellas las calles Sarmiento, Mascardi, Ramayón, y Curruhuinca. De esta manera, crecen las opciones liberadas, se asegura el ordenamiento en las troncales y se garantiza el ordenamiento y rotación en la zona núcleo, aplicando a ella la mayor restricción".

La Defensoría entiende que "permitiría asegurar una más 'amigable' disposición del espacio para los automovilistas, facilitando la opción entre quienes quieren pagar y quienes no; no debería tener un impacto significativo en la proyección de ingresos y ecuación contractual, a la vez que se garantizaría el ordenamiento del tránsito y de rotaciones en la zona de mayor uso intensivo y en las troncales de ingreso y egreso del casco histórico".

Un punto no menor que plantea la Defensoría es la necesidad de determinar si se considera al estacionamiento medido un tributo o una tarifa. De ser esto último, requiere para su aprobación una audiencia pública, que a todas luces en San Martín de los Andes no se realizó. Si fuera un tributo debe incorporarse a la Ordenanza Tarifaria. 

Ante esta duda, solicitaron que se les informe la naturaleza jurídica conferida por el Poder Ejecutivo y el Poder legislativo municipal al "pago de carácter obligatorio en concepto de canon por el uso de un espacio público de la calzada, equivalente al necesario para el estacionamiento de 1 (un) vehículo durante un lapso determinado de tiempo”.

Y en segundo lugar, "de aplicar el carácter tributario, informe si la autorización conferida por el Concejo Deliberante en la Ordenanza 14379/23 comporta también la autorización para fijar el precio del uso del espacio público para el estacionamiento medido y pago y, si así fuere, si tal autorización se pretende encuadrar en una delegación de facultades, habiéndose previsto las limitaciones propias de este instituto".

Mientras tanto, los vecinos continúan con la recolección de firmas para alcanzar el 25 por ciento del padrón electoral, que les permitiría solicitar la revocatoria de la Ordenanza, acción que se desarrolla a buen ritmo considerando que les exigieron firmas autenticadas ante escribano público.