La Prefectura Naval Argentina protagonizó en las últimas horas dos operativos que quedarán marcados como históricos: en menos de un día rescató a dos tripulantes de buques pesqueros que habían sufrido graves emergencias médicas en alta mar. La hazaña tuvo un condimento especial: fue el debut operativo de la Estación Aérea Viedma, recientemente inaugurada, que se estrenó de la mejor manera posible, salvando vidas.
El primer llamado de auxilio llegó desde el pesquero “Suemar”, que navegaba a más de 200 kilómetros de Rawson, en cercanías de Bahía Camarones. Uno de sus tripulantes, mientras trabajaba en la cocina, se descompensó con fuertes dolores en el pecho y episodios de desvanecimiento. La situación era desesperante.
De inmediato, Prefectura puso en marcha un despliegue aéreo inédito: un avión de patrullaje salió a ubicar el buque en la inmensidad del mar, mientras un helicóptero con médicos y rescatistas se preparaba para la maniobra más riesgosa. En plena navegación, y con el oleaje golpeando la cubierta, los hombres descendieron desde la aeronave, izaron al paciente y lo estabilizaron en vuelo. Minutos después, el avión aterrizó en Trelew, donde una ambulancia lo trasladó al hospital local. Fue el primer rescate aéreo de la base de Viedma, y salió perfecto.
Pero la historia no terminó ahí. Horas después, otro pedido de auxilio volvió a poner en alerta a la Prefectura. Esta vez, desde el buque “Comandante Luis Piedrabuena”, a 83 kilómetros de Bahía Blanca. Un tripulante de 40 años sufría un síndrome coronario agudo acompañado de un cuadro neurológico. La situación era crítica, pero la cercanía de la noche obligó a postergar la extracción. Con las primeras luces del amanecer, un helicóptero Dauphin PA-40 y un avión Beechcraft PA-22 despegaron desde Viedma. En otra maniobra quirúrgica en altamar, el hombre fue izado y trasladado de urgencia al aeropuerto de la capital rionegrina, donde una ambulancia lo esperaba para llevarlo a una clínica.
En menos de 24 horas, la Prefectura demostró su capacidad de reacción, coordinación y precisión en escenarios extremos. Los dos rescates no solo evitaron tragedias, sino que confirmaron el papel estratégico de la nueva Estación Aérea Viedma, que ya se convirtió en un pilar para la seguridad en el litoral marítimo.