En la calle Industriales Neuquinos, en pleno Parque Industrial de Neuquén, la postal se repite sin pausa: un canasto de basura desbordado, restos esparcidos por el piso y bolsas abiertas.
No se trata de falta de recolección —el camión pasa todos los días cerca de las 13—, sino de una combinación de malos hábitos y desidia: vecinos que sacan los residuos fuera de horario y personas en situación de calle que revisan las bolsas, dejando un reguero de desperdicios.
En total, son siete los canastos de basura que se encuentran “detonados” a lo largo de la calle, generando focos de suciedad que se convierten en microbasurales. Desde la Municipalidad de Neuquén aseguran que el problema no es nuevo, pero que en ciertos sectores la situación empeora pese a los operativos de limpieza.
Esta semana, en declaraciones al programa La Primera Mañana por AM550, el subsecretario de Limpieza Urbana de la Municipalidad de Neuquén, Cristian Haspert, fue contundente: “Hay vecinos que no entienden por las buenas. Entonces se les van a empezar a complicar algunos trámites”. La frase no es una amenaza vacía: el municipio analiza una medida inédita en la ciudad, impedir que quienes tengan antecedentes por arrojar basura en la vía pública puedan tramitar la licencia de conducir.
Haspert explicó que la problemática de los microbasurales se repite en distintos barrios de la ciudad. Mencionó entre otros, los barrios de Valentina Sur y Confluencia, en algunos casos la limpieza dura apenas media hora: “En calles como Maquinchao, San Julián o Chocón limpiamos hoy y mañana ya está todo igual. Es frustrante”.
Además de la conducta de algunos vecinos, el funcionario apuntó contra los recolectores informales que rompen las bolsas para buscar latas o materiales reciclables: “No estamos en contra del cirujeo, pero no puede ser que el vecino saque la basura como corresponde y después tenga que salir a juntar lo que quedó desparramado por otro”.
La propuesta de endurecer las sanciones ya está en conversación con concejales y jueces de Faltas. “Si no te importa el ambiente, tampoco vas a poder manejar tranquilo por la ciudad”, advirtió Haspert.
Mientras tanto, en el Parque Industrial, el canasto rebalsado y la basura en el piso siguen recordando que, por más operativos que haya, el cambio depende -y mucho- de la conducta ciudadana.