La concejal peronista Liliana Cristina Gauna denunció al presidente del Concejo Deliberante de Sierra Grande, Carlos Negri, por violencia de género, institucional, administrativa y política. Ambos fueron compañeros en el peronismo, pero hoy están enfrentados en un conflicto que derivó en una presentación en la Justicia.
Según la presentación judicial, la edil relató hostigamientos, malos tratos y amenazas que —asegura— le generan incomodidad y angustia en el ejercicio de su cargo. También expuso que no recibe respuestas a trámites, que le niegan materiales de trabajo y que ni siquiera tiene un espacio físico para desarrollar sus tareas, porque la oficina del bloque permanece cerrada con llave.
En la denuncia quedó asentado que varios concejales fueron testigos de estos episodios. Incluso, el hecho que terminó de detonar la situación ocurrió en plena sesión, cuando Negri interrumpió el debate sobre un proyecto de Gauna y, en voz alta, lanzó una frase que encendió todas las alarmas: "Ahora agárrense".
Gauna había advertido semanas atrás a sus pares lo que estaba viviendo, pero esta vez decidió avanzar en la vía judicial. La denuncia fue presentada a las 11 de la mañana y ya está bajo análisis en el juzgado de Paz local. Allí pide que cesen los actos de hostigamiento y que se dicten medidas de restricción contra el presidente del cuerpo.
Lo que hasta hace poco parecía una interna política dentro del Concejo ahora escaló a un conflicto judicial que promete sacudir la vida institucional de Sierra Grande.