En el límite entre Fernández Oro y Cipolletti, los crianceros del barrio Costa Linda enfrentan una crisis ambiental y productiva. La acumulación de basura en campos y caminos se volvió una amenaza directa para sus animales, que mueren tras ingerir desechos arrojados por personas que evitan llevar sus residuos al basurero.
"La gente no quiere pagar o no va al basurero y tira la basura acá, y los que sufrimos somos nosotros y los animales", denunciaron con angustia desde el puesto Colipe, según informó Inforo.
La gravedad del problema no se reduce a una sola muerte: los crianceros encontraron restos de plásticos, envases y otros desechos dentro del sistema digestivo de sus animales muertos. Estos hallazgos confirman que el ganado está siendo víctima directa de la irresponsabilidad humana. Esta situación, además, compromete seriamente la economía familiar de quienes viven de la cría de animales.
Pero el problema va más allá de lo productivo. La acumulación de residuos en áreas rurales no solo pone en riesgo la salud del ganado, sino también la de las personas que habitan y transitan la zona. La proliferación de vectores, malos olores y la contaminación del suelo hacen que vivir en Costa Linda sea cada vez más difícil. Los crianceros aseguran que no pueden seguir conviviendo con la basura ajena y exigen soluciones concretas.
Los vecinos piden controles más estrictos, campañas de concientización y un mayor compromiso de las autoridades locales para frenar esta peligrosa costumbre. La situación, aseguran, es insostenible. Si no se actúa pronto, no solo seguirán muriendo los animales, sino que el impacto ambiental podría ser irreversible. “No pedimos nada extraordinario: solo que cuiden el lugar donde todos vivimos”, concluyeron.