La comunidad educativa de Regina expresó repudio ante los hechos de vandalismo registrados en la Escuela N°220, donde se registraron roturas de vidrios en las puertas de la institución. El Consejo Escolar manifestó su “profunda preocupación” por lo ocurrido y pidió mayor compromiso social para cuidar los espacios educativos.
“Lamentamos profundamente estas acciones que atentan contra el patrimonio escolar y, sobre todo, contra el espacio de aprendizaje y convivencia de nuestros niños, niñas y adolescentes. La escuela es el lugar donde nuestros hijos crecen, comparten, aprenden y construyen vínculos, por lo que debe ser cuidada y defendida por toda la comunidad”, expresaron.
Además, convocaron a “vecinos, familias y a la comunidad a defender nuestras escuelas y a denunciar de manera inmediata ante las autoridades competentes cualquier hecho de vandalismo o situación sospechosa que ponga en riesgo a nuestras instituciones educativas. El compromiso y el cuidado de la escuela es responsabilidad de todos. Entre todos podemos garantizar que siga siendo un espacio seguro, inclusivo y de encuentro para nuestros estudiantes”, concluyeron.
Desde la dirección del colegio se indicó que no es la primera vez que se registran hechos similares, y se pidió reforzar la seguridad en el perímetro. Las autoridades educativas destacaron el trabajo del personal que intervino rápidamente para garantizar el funcionamiento del establecimiento.
El Consejo Escolar recordó que el edificio escolar es un espacio público destinado a garantizar derechos, y que su destrucción representa una agresión directa a la comunidad. “No podemos naturalizar estos hechos. Necesitamos que toda la sociedad se involucre en el cuidado de las escuelas”, expresaron. También se solicitó a las autoridades municipales y policiales que se refuercen los patrullajes en horarios nocturnos y fines de semana.