La noche del miércoles, el barrio Unión de Mayo volvió a sufrir el accionar de un grupo de motociclistas que con escapes libres, maniobras peligrosas y ruidos ensordecedores interrumpieron la paz de los vecinos. Pasadas las 21, un grupo de motociclistas irrumpió en el Parque Lineal con escapes libres, aceleradas violentas y maniobras peligrosas que desataron el enojo de cientos de familias que no podían descansar.
La situación derivó en un operativo conjunto entre la Municipalidad de Neuquén y la Policía provincial, que logró desarticular la concentración y retener 32 motos de un total de 50 presentes.
Los vecinos aseguran que las provocaciones fueron intencionales. Cuando intentaron frenar la situación, recibieron burlas en la cara y más ruido como respuesta. La situación se volvió tan insoportable que muchos terminaron saliendo de sus casas a los gritos, hartos de la impunidad.
Francisco Baggio, subsecretario de Medio Ambiente y Protección Ciudadana de Neuquén, explicó que una persona fue detenida tras protagonizar disturbios e incluso agredir a vecinos. “Esta agrupación, que se hace llamar Oeste Stunt, genera provocaciones e intimidaciones violentas. No vamos a permitir que esta práctica se instale en la ciudad. Vamos a ser muy duros en lo contravencional”, aseguró en declaraciones al programa Neuquén.Ar por AM550.
En medio del despliegue, un hecho colmó la paciencia de todos: un joven aceleró su moto en la cara de una vecina en señal de burla. Baggio no dudó en calificarlo como “una burla tremenda” y un acto de “provocación que casi roza el delito”.
El funcionario adelantó que pedirá a la jueza de Faltas que, además de las multas habituales, se aplique una sanción extra: retener las motos durante seis meses. “Hoy pagan la multa, que ronda el millón de pesos por las tres contravenciones, y se van a su casa. Esto no puede seguir así”, señaló.
Baggio también puso en duda la procedencia de los vehículos secuestrados: “Voy a pedir a la Policía que verifique las motos en el predio de Tránsito porque presumo que varias pueden ser robadas. Nadie en su sano juicio destroza su propia moto acelerándola al máximo hasta romperla. Eso me hace pensar que no les importa porque no son suyas”.
Además, fue contundente al describir el peligro que representan estas conductas: “Son los futuros asesinos al volante. Hoy hacen piruetas en moto y mañana manejan un auto o un camión a toda velocidad en una avenida. Después tenemos que lamentar víctimas. Por eso debemos ser duros y estrictos”.