Los expilotos de automovilismo Felipe Massa y Kevin Magnussen, la estrella del tenis Novak Djokovic y el fundador de Oakberry, Georgios Frangulis, se han convertido en propietarios de Le Mans, un club que actualmente milita en la segunda división del fútbol francés. Según el acuerdo, los inversores se convirtieron en accionistas minoritarios a partir de la temporada 2025/2026, obteniendo una participación significativa en el club dirigido por el francés Thierry Gómez. Las cifras de la operación aún no se han revelado. En declaraciones al Diario Brasil, Pedro Oliveira, fundador de OutField, elogió el potencial del negocio, destacando las condiciones encontradas en Le Mans.
"Le Mans es una empresa muy organizada. No tiene deuda, dispone de efectivo, cuenta con una buena infraestructura, con un estadio con capacidad para 25.000 personas y dos centros de entrenamiento, y una trayectoria muy positiva en el desarrollo de talento", afirmó Pedro.
Esta es la tercera inversión de capital de OutField en un club de fútbol. Anteriormente, la compañía invirtió en Maringá, de donde ya se fue, y actualmente tiene participación en Coritiba, que actualmente juega en la Serie B brasileña. Además, la compañía pondrá a disposición de Le Mans toda su experiencia de gestión, consolidada en asociaciones con marcas relevantes para la industria, incluyendo clientes como Atlético-MG, Flamengo, Coritiba, Red Bull Bragantino, Barcelona, Inter de Milán y América (MEX), además de New Balance, Banco Bmg, Clear, Elo y HBO Max.
La inversión, que busca aprovechar el potencial de la ciudad de Le Mans, sede de una de las carreras más emblemáticas del automovilismo, las 24 Horas de Le Mans, se pagará a plazos. La mayor parte se destinará a mejorar el estadio del club, incluyendo la construcción de una zona VIP y la sustitución de todo el césped del centro de entrenamiento de los jugadores.
Fundado hace 40 años, el club francés cuenta con una larga trayectoria futbolística. Además de mantenerse en la primera división entre 2004 y 2011, el equipo llegó a la final de la Copa de Francia. Sin embargo, tras este período, enfrentó graves problemas financieros y sufrió en el ámbito deportivo, llegando a la sexta división del país.