El aterrizaje de Susana Giménez en Miami no pasó desapercibido. A las cuatro de la mañana, la diva argentina apareció en el aeropuerto con anteojos oscuros, rodeada por asistentes y utilizando una silla de ruedas. En cuestión de minutos, los rumores entre quienes la reconocieron comenzaron a circular y generaron inquietud entre quienes la esperaban en Estados Unidos. Ante esto, la noticia llegó a Argentina y se conocieron los detalles.
La noticia se conoció a través de Laura Ubfal, quien relató lo ocurrido en el programa Storytime de Bondi Live. “Me acaban de llamar de Estados Unidos, gente que estaba en el aeropuerto, y me dijeron que Susana subió y bajó primera del avión de American Airlines en su llegada a Miami”, contó la periodista, sorprendida por la escena.
Según Ubfal, para llevarle tranquilidad a la gente, relató que el episodio no tuvo que ver con ningún problema de salud. “No le pasa nada, fue simplemente para estar cómoda”, aclaró. Y explicó que se trató de un servicio especial para pasajeros mayores que buscan evitar las largas caminatas entre terminales: “Es un sistema para gente grande”, remarcó.
Sin embargo, la versión de que Susana Giménez llegó en silla de ruedas despertó curiosidad. Acostumbrada a los viajes privados y al trato VIP, la conductora mantiene su estilo impecable incluso en los aeropuertos. En este caso, la asistencia fue parte del protocolo que muchas figuras internacionales utilizan, aunque la imagen no tardó en encender especulaciones.
La periodista también sumó que se desconoce el motivo exacto del viaje. Lo único confirmado es que la visita no estaría relacionada con los Martín Fierro Latino 2025, que se celebrarán en la ciudad durante noviembre. Algunos allegados creen que se trata de un viaje personal, mientras otros aseguran que podría estar vinculada a compromisos comerciales.
Fiel a su costumbre, y teniendo en cuenta su situación, Susana Giménez no emitió declaraciones. Prefiere mantener el bajo perfil cada vez que viaja, aunque ni siquiera el anonimato del aeropuerto logra que pase inadvertida.
A sus 80 años recién cumplidos, la diva continúa marcando presencia donde vaya. Su llegada a Miami volvió a demostrar que, incluso sin hablar, Susana Giménez sigue siendo una figura capaz de convertir cualquier aparición en noticia.