La estadía de Furia Scaglione en Chile venía siendo intensa, pero lo que ocurrió en las últimas horas dentro de El Internado superó cualquier cruce o trama del reality. En medio de un ambiente cargado, la producción llevó a un chamán para realizar una limpieza energética y la situación terminó virando hacia un episodio inesperado, con revelaciones fuertes que la dejaron completamente descolocada.
Todo empezó cuando Furia Scaglione pidió la palabra frente al resto de los participantes. Con la voz firme, contó que desde hace tiempo arrastra una sospecha que la inquieta profundamente: la idea de que, en el momento de mayor exposición pública tras Gran Hermano y justo cuando le diagnosticaron leucemia linfocítica crónica, fue víctima de un “trabajo” destinado a dañarla. Esa convicción, dijo, la acompaña desde entonces y es parte del peso emocional que la sigue marcando.
Sin rodeos, compartió su versión ante todos: “Quería preguntarte si podías hacerme una limpieza porque yo considero que me hicieron un trabajo de muerte y que no pudieron contra mí. Me diagnosticaron leucemia linfocítica crónica. Siempre fui atleta, deportista y cuando pegué mi fama, pero así muy exponencial, en mi mejor momento me diagnostican eso. Problema en la sangre”. El silencio que siguió fue inmediato.
El chamán, que la escuchó sin interrumpir, se tomó unos segundos antes de darle una respuesta que heló el estudio. “Te hicieron un trabajo. Te han soplado, te han hecho literal vudú o un trabajo de umbanda”, lanzó con seguridad, validando —desde su mirada espiritual— todo aquello que Furia venía imaginando hace meses.
Pero la tensión no terminó ahí. Cuando el hombre se acercó para iniciar la limpieza, frenó de golpe. Dio un paso atrás y soltó una frase que dejó al público mudo: “¿Sabes por qué me alejo? Porque ese espíritu no permite que te diga nada”. La cámara enfocó a Furia, completamente impactada, intentando procesar lo que acababa de escuchar.
A continuación, el chamán tomó hojas de coca para analizar su energía. Tras observarlas con detenimiento, avanzó con otra interpretación igual de dura: “Esta hoja marca un tema emocional muy fuerte. Es tu corazón… pero es un corazón dañado por lo que viviste”. La participante quedó paralizada, sin encontrar palabras para responder.
Luego, le dijo que podía acompañarla en un posible proceso de sanación, pero que no sería simple ni inmediato. Entre las recomendaciones, le pidió abrazar árboles, caminar descalza y volver a conectarse con la naturaleza para liberarse de las cargas negativas que, según él, todavía la rodean.
La escena se viralizó en minutos. Mientras algunos compañeros del reality miraban con incomodidad y otros con sorpresa, en redes la discusión explotó: hubo quienes creyeron en cada palabra del ritual y quienes lo tomaron como un golpe de efecto televisivo. Lo cierto es que Furia Scaglione volvió a quedar en el centro de la conversación. Entre su carácter intenso, confesiones durísimas y episodios cada vez más desconcertantes, sigue siendo una de las figuras más poderosas —y polémicas— del ciclo chileno.