Mientras la familia Tinelli atraviesa días turbulentos y las versiones se multiplican, José María Listorti decidió dar la cara. Con la calma que lo caracteriza, el conductor habló sobre su vínculo con Marcelo Tinelli y, lejos de esquivar el tema, dejó en claro que no está dispuesto a sumarse a la ola de críticas que recae sobre su exjefe y amigo.
En diálogo con Puro Show, el humorista fue categórico desde el primer momento: “Me dijeron que Marcelo se quedaba un día más en Punta del Este. No pregunté yo, mientras menos sepa mejor. Prefiero no involucrarme, no puedo hacerlo, es un tema muy personal”, aclaró, marcando distancia de los rumores pero mostrando empatía.
Listorti explicó que prefiere no opinar sobre cuestiones familiares y se concentró en resaltar el costado humano de Tinelli. “Yo puedo opinar como conductor, del programa, de los cheques que debe... pero está mal opinar como padre. No podemos opinar, es un tema muy complicado. Si hubo una amenaza es un tema jodido para opinar libremente, la familia la debe estar pasando muy mal”, expresó, con la cautela de quien conoce desde adentro la exposición mediática.
Lejos de aprovechar el momento, el ex VideoMatch insistió en que no quiso incomodar a Marcelo ni involucrarse en algo que lo afectara emocionalmente. “No sé qué puedo aportar yo. No le pregunté nada porque no quiero ponerlo en el compromiso de contarme algo si no tiene ganas”, confesó, evidenciando un respeto que va más allá de la pantalla.
También se refirió a las críticas que, en los últimos días, rodearon al conductor de ShowMatch. “No me gusta que ahora se hable de que Tinelli es una porquería, yo lo sigo bancando porque lo quiero, estoy donde estoy gracias a él y mi laburo. Si me necesita y puedo, estoy”, dijo, visiblemente molesto con el oportunismo de algunos colegas.
Con su habitual franqueza, Listorti fue más allá y lanzó una reflexión que resonó fuerte entre los espectadores: “Hay mucha gente que estaba esperando para pegarle. Aprovecharon el momento. Como argentinos nos encanta elevar a la gente y cuando está arriba bajarlo, tenemos el morbo de ver bajar al ídolo”, apuntó sin filtro, defendiendo a Tinelli pero también dejando en evidencia una crítica al ambiente mediático.
Finalmente, el conductor cerró con un mensaje de afecto hacia su antiguo compañero de trabajo. “El tema de la amenaza me sorprendió muchísimo, me duele por la familia”, concluyó, dejando en claro que, más allá de las polémicas y las diferencias, su lealtad hacia Marcelo sigue intacta.