La calma nunca parece llegar del todo a la vida de María Fernanda Callejón. En las últimas horas se conoció que la actriz atraviesa una situación económica compleja que no solo afecta su presente, sino también las negociaciones con su ex pareja, Ricky Diotto. Según revelaron en un programa de espectáculos, la cifra que estaría en juego es millonaria.
El disparador fue la información que salió a la luz en Infama, donde se aseguró que María Fernanda Callejón estaría a punto de perder su camioneta por falta de pago. Las cuotas mensuales del vehículo rondarían los 600 mil pesos, monto que, al parecer, se volvió imposible de sostener en los últimos meses. La situación despertó sorpresa, ya que coincide con la inminente vuelta de la artista al teatro porteño.
La periodista Karina Iavícoli fue quien expuso el tema con su estilo directo: “La empresa que financia la camioneta ya no sabe cómo ubicarla para que pague”. Según agregó, el atraso en las cuotas habría generado un escenario complicado, que podría derivar en un embargo inmediato del vehículo si la deuda no se regulariza.
Lo llamativo es que este problema no aparece aislado, sino enmarcado en la tensa relación con su exmarido. En paralelo a las discusiones sobre la camioneta, María Fernanda Callejón y Ricky Diotto estarían cerrando un acuerdo millonario por la división de bienes. Allí entran en juego la vivienda familiar y otros compromisos financieros que mantienen compartidos.
En el ámbito del espectáculo, las especulaciones son muchas. Algunos sostienen que el conflicto por la camioneta es solo la punta del iceberg y que las negociaciones con Diotto implican montos mucho mayores. Entre ellos, se habla de una suma que podría alcanzar varios millones de pesos para cerrar definitivamente el capítulo de la separación.
La casa familiar es otro de los puntos de fricción. Según trascendió, María Fernanda Callejón habría planteado que la propiedad quede a nombre de su hija hasta la mayoría de edad, mientras ambos continúan pagando la hipoteca, que rondaría el millón y medio por mes. Un esquema difícil de sostener si ya hay problemas para cumplir con otros compromisos.
Así, la artista enfrenta un frente doble: por un lado, la presión de los acreedores de la camioneta; por el otro, el acuerdo millonario con su ex, que todavía no encuentra resolución. En ese contexto, las deudas parecen multiplicarse y las soluciones no aparecen.
La gran incógnita que sobrevuela es si María Fernanda Callejón podrá estabilizar su situación financiera antes de que los problemas se transformen en una bola de nieve. Por ahora, el futuro inmediato parece teñido de incertidumbre, con un escenario judicial y económico cada vez más complejo.