Celeste Cid decidió ponerle un freno a las especulaciones sobre su imagen y lo hizo con un descargo contundente en redes sociales. La actriz, que lleva casi tres décadas de carrera en televisión y cine, fue clara luego de que se la acusara de hacerse retoques estéticos: “No tengo cirugías: soy una mujer de casi 42 años, y me parece justo que las mujeres podamos crecer en paz”.
La respuesta surgió luego de que en los últimos días su nombre se instalara en redes sociales por un motivo ajeno a su trabajo: los comentarios sobre su rostro en recientes apariciones públicas. Lejos de esquivar la polémica, Celeste Cid eligió escribir en Instagram lo que piensa de esos juicios: “Leí algunos comentarios, sobre todo hablando de cuestiones estéticas (ya no tiene la misma cara que a los 20, ¿qué se hizo?, basta de cirugías)”.
En medio de la ola de críticas, también destacó el apoyo de quienes siguieron su carrera desde el comienzo. “Me encontré con tantos mensajes hermosos hacia mí y hacia mi trabajo. 30 años, este año, que me llenan de alegría saberlos ahí, que sigan recordando personajes, frases, historias, saber que fueron compañía de tantos, en tantos momentos”, señaló con emoción.
Sin embargo, la actriz no sólo desmintió intervenciones quirúrgicas, sino que además cuestionó la exigencia social de permanecer inalterable con el paso del tiempo. “Pretender que tengamos la misma cara para siempre, además de cruel, es imposible”, apuntó, dejando en claro que la presión estética no distingue edades ni trayectorias.
Con un tono más reflexivo, sumó una mirada crítica sobre cómo esos mensajes terminan replicando mandatos culturales. “El hecho de que además estos comentarios sean escritos por otras mujeres no hace más que evidenciar el mandato que tenemos encima: ‘no se nos está permitido envejecer’”, expresó.
Finalmente, la actriz invitó a repensar la relación con el tiempo, con el propio cuerpo y los comentarios de este tipo que pueden terminar siendo hirientes. “No hay manera de frenar eso, abracemos el tiempo, incluso el que le dedicamos a escribir mensajes a otrxs, también es tiempo de nuestras propias vidas”, cerró.
De esta forma, Celeste Cid transformó lo que podría haber sido un simple desmentido en una reflexión profunda sobre el paso del tiempo, la mirada ajena y la necesidad de reconciliarse con los propios cambios.