La salud de Christian Petersen mantuvo en vilo al mundo de la gastronomía y a sus seguidores durante varios días. Tras una semana marcada por la incertidumbre y la preocupación, en las últimas horas comenzaron a conocerse novedades alentadoras sobre su estado, luego de atravesar un cuadro extremadamente delicado que obligó a una internación de urgencia en la Patagonia.
Christian Petersen permanece internado en el Hospital Ramón Carrillo de San Martín de los Andes, adonde fue trasladado después de sufrir una fuerte descompensación en la base del volcán Lanín. El episodio ocurrió mientras realizaba una actividad en la zona y encendió rápidamente las alarmas, no solo por la gravedad del cuadro inicial, sino también por el hermetismo que rodeó los primeros días de su evolución.
La información oficial tardó en llegar y, cuando finalmente se difundió el primer parte médico, el panorama fue preocupante. Desde el centro de salud se habló de una “falla multiorgánica”, un diagnóstico que generó alarma y dio cuenta de la complejidad del cuadro que atravesaba el chef. Durante esos días, el silencio y la cautela fueron la constante, mientras la familia y el entorno más cercano evitaban dar precisiones.
Con el correr del tiempo, y ya a diez días de la internación, comenzaron a aparecer señales que trajeron algo de alivio. Desde Radio Mitre difundieron una actualización positiva sobre el estado de Christian Petersen. “La salud de Christian Petersen evoluciona. Acabo de hablar con el entorno laboral del chef. Buenas noticias”, señalaron, marcando un cambio de clima en torno a su recuperación.
La información fue ampliada poco después con detalles que generaron esperanza. “Mejora de a poco. En las últimas horas se despertó, lloró y también sonrió. Fue desentubado”, agregaron, confirmando que el chef pudo reaccionar y mostrar signos claros de mejoría. Esas primeras respuestas emocionales, simples pero significativas, fueron interpretadas como un avance clave dentro de un proceso que aún requiere cuidado y seguimiento médico.
Sin embargo, no todo fue alivio. En paralelo a estas novedades, también trascendió el malestar del entorno de Christian Petersen por la manera en que se manejó la información durante los momentos más críticos. El periodista Juan Etchegoyen aportó un dato contundente al respecto: “Lo otro que me informan es que la familia está muy enojada con la prensa por el tratamiento del tema. Textual que me dicen: ‘Lo dieron un poco más por muerto’”.
Ese enojo refleja el impacto que tuvieron algunas versiones difundidas sin confirmación oficial, en un contexto de extrema sensibilidad. Desde el entorno del chef remarcan que cada avance, por pequeño que sea, es fundamental y que el proceso de recuperación será gradual.
Por estas horas, Christian Petersen continúa acompañado por sus seres queridos, mientras el equipo médico sigue de cerca su evolución. La mejora registrada trae alivio, pero también prudencia: el camino hacia la recuperación todavía es largo. Aun así, el hecho de que haya despertado y mostrado reacciones conscientes se transformó en la noticia más esperada, una señal positiva en medio de días que estuvieron cargados de angustia.