Un hombre fue baleado en Allen y, se refugió en un patio de una casa para salvar su vida. Lo encontró la Policía y tuvo que ser trasladado al hospital de urgencia. El ataque ocurrió en plena calle y los agresores escaparon en una moto enduro.
El hecho ocurrió anoche, cerca de las 22 cuando los vecinos de Petunias y Crisantemos escucharon dos fuertes detonaciones. Primero pensaron que podían ser cohetes, pero enseguida vieron a la gente corriendo, guardando los autos y cerrando portones. No tardaron en entender que lo que sonó fue un arma de fuego.
Mientras tanto, la Policía ya estaba en alerta. Minutos antes, el 911 había recibido un llamado avisando que dos sujetos en una moto enduro blanca estaban disparando cerca de una panadería del barrio 11 de Septiembre. Cuando los móviles de la Brigada Motorizada de Apoyo comenzaron a recorrer la zona, la trama del ataque terminó de revelarse.
Porque, en medio del caos, un vecino le preguntó a la dueña de una casa si habían herido a su marido, ya que había visto a un hombre entrar corriendo a su patio. La mujer, preocupada, salió a mirar y enseguida se cruzó con el personal policial al que le contó lo que estaba pasando.
Con su autorización, los uniformados ingresaron al patio y se encontraron con una escena que los dejó helados: un joven tirado en el suelo, respirando con dificultad y dolorido de pies a cabeza. Cuando le preguntaron quién era, alcanzó a decir su nombre y que tenía 26 años. También explicó lo que todos ya sospechaban: que le habían disparado con una escopeta.
A esa altura, la ambulancia ya estaba en camino. El herido fue asistido y trasladado de inmediato al hospital local, mientras el barrio seguía en vilo sin entender qué había pasado ni por qué.
Más tarde, el Gabinete de Criminalística levantó las primeras evidencias, revisó el patio y comenzó la reconstrucción del ataque. La fiscal Vanesa Giardina, ordenó iniciar actuaciones por abuso de arma y notificó al área de investigaciones para dar con los dos ocupantes de la moto enduro que siguen prófugos.
Los primeros datos hacen suponer que el ataque fue por una deuda narco, y que la víctima fue perseguida hasta que pudo refugiarse en un patio para zafar de las balas.
