El juez federal a cargo de la investigación dictó el procesamiento de Ariel García Furfaro, dueño del laboratorio vinculado al fentanilo contaminado que generó alarma en el sector sanitario. La medida se produce en el marco de una investigación por operaciones comerciales con China que habrían incluido la sobrefacturación de máquinas importadas para la producción del laboratorio.
Según indicaron fuentes judiciales, García Furfaro declaró un monto inferior ante la Aduana, con el objetivo de reducir impuestos y costos asociados a la importación. Esta maniobra quedó bajo la lupa del juzgado, que investiga posibles delitos de fraude aduanero y falsedad documental.
El procesamiento se da en paralelo a las pesquisas sobre la contaminación del fentanilo, que habría puesto en riesgo a pacientes y generó investigaciones de carácter sanitario y penal. Las autoridades buscan determinar si las irregularidades en las operaciones comerciales pudieron haber tenido impacto directo en la calidad y seguridad de los productos del laboratorio.
Por su parte, los abogados de García Furfaro sostienen que las transacciones comerciales fueron legítimas y que cualquier diferencia en los valores declarados obedecería a errores contables o administrativos, aunque la justicia continúa recabando documentación y pruebas de respaldo.
El caso mantiene alerta en el ámbito sanitario y judicial, ya que involucra tanto la seguridad de medicamentos como posibles maniobras de evasión aduanera.