La causa que investiga el violento robo en Cinco Saltos, sigue tomando impulso con la detención de un nuevo sospechoso. El crimen del estafador Nicolás Perozzi Russo, herido de bala durante el hecho y fallecido varios días después, tiene ahora dos acusados, uno tras las rejas y otro con monitoreo electrónico.
El brutal episodio ocurrió a las 8:45 de la mañana del 3 de julio, en una casa ubicada sobre la calle Ameghino, cuando varias personas ingresaron por la fuerza. En el interior estaba Perozzi y su mamá de 74 años. El hombre, conocido por múltiples denuncias de estafas en redes sociales, recibió siete disparos en las piernas y sufrió graves fracturas. Fue internado en el Hospital Castro Rendón de Neuquén, pero se fue antes de completar su recuperación. Semanas después murió en su domicilio.
Tras la muerte, la investigación se aceleró. La Justicia concretó un allanamiento en Neuquén donde arrestó a un primer sospechoso,que en la audiencia de formulación de cargos fue acusado por “robo agravado en poblado y en banda con uso de arma de fuego”. Carlos Matus quedó detenido con prisión preventiva por riesgo de fuga.
Al día siguiente, la Brigada de Investigaciones dio con un segundo implicado. En la audiencia, fue acusado por el delito de robo agravado y quedó en libertad, aunque con monitoreo electrónico a través de una tobillera.
El primer acusado es un empresario cárnico con antecedentes, vinculado a conflictos comerciales y denuncias previas con la víctima, quien también tenía antecedentes por estafas. Por lo que la Justicia no descarta que el hecho esté relacionado con una deuda previa entre ellos y una venganza de Matus contra Perozzi Russo. Los datos sobre su atacante los brindó la propia víctima mientras esperaba la atención médica tras el ataque.