Un hecho conmocionante sacude a la ciudad de Centenario. El fiscal del caso, Andrés Azar, junto con la asistente letrada Carolina Gutiérrez, formuló cargos este lunes contra M.E.M., a quien le atribuyeron haber asesinado a golpes a su hijo de apenas 39 días.
La acusación se realizó en la Ciudad Judicial, donde el Ministerio Público Fiscal (MPF) solicitó que el hombre quede detenido con prisión preventiva. Según la investigación preliminar, el crimen ocurrió el sábado pasado entre las 6 y las 12.50 en la vivienda familiar del barrio España, donde el acusado convivía con su pareja y otros hijos menores de edad.
“Le dio una gran cantidad de golpes de puño al bebé”, sostuvo el fiscal durante la audiencia. El informe preliminar de autopsia del Cuerpo Médico Forense confirmó que la muerte se produjo por los traumatismos ocasionados en distintas partes del cuerpo. Dos de ellos –uno en el cráneo y otro en el abdomen– fueron considerados de suficiente entidad para provocar el deceso.
El delito atribuido fue homicidio agravado por el vínculo, en carácter de autor.
El informe preliminar de autopsia del Cuerpo Médico Forense confirmó que la muerte se produjo por los traumatismos ocasionados en distintas partes del cuerpo. Dos de ellos –uno en el cráneo y otro en el abdomen– fueron considerados de suficiente entidad para provocar el deceso.
El fiscal también describió que, al momento de los hechos, en la casa estaban la madre del bebé y los otros dos niños de la pareja. Azar indicó que la mujer es sospechosa de tener algún grado de participación, aunque aún no fue formalmente acusada. Se le designó un abogado defensor y se investiga su rol, ya que las lesiones que presentaba el bebé no serían compatibles con la versión que ella relató: que el niño había caído de los brazos del padre.
En la audiencia se expuso además que existen indicios de que la mujer vivía en un contexto de violencia ejercida por el acusado, algo que también habría alcanzado a los niños del grupo familiar, de acuerdo a los testimonios recogidos por el MPF.
El acusado aseguró: “Fue un accidente; jamás le pegué a mis hijos”. Sin embargo, el juez descartó la posibilidad de negligencia en este estadio de la investigación.
El juez de garantías Marco Lupica Cristo avaló la formulación de cargos, fijó el plazo de investigación en cuatro meses y respaldó el pedido de prisión preventiva por el mismo período. Consideró que existen riesgos de entorpecimiento de la investigación, de fuga y para la integridad de los testigos.
En su defensa, el acusado aseguró: “Fue un accidente; jamás le pegué a mis hijos”. Sin embargo, el juez descartó la posibilidad de negligencia en este estadio de la investigación.
La investigación continuará en los próximos meses para determinar las responsabilidades en un caso que generó profunda conmoción en la comunidad de Centenario.