El Gobierno nacional, tal como se descontaba, adjudicó a Transportadora de Gas del Sur (TGS) las obras de ampliación del Gasoducto Perito Moreno, obra que demandará más de US$700 millones y para la cual la empresa, controlada por Pampa Energía y la familia Sielecki, era único oferente en la licitación pública realizada a partir de la primera iniciativa privada presentada durante este gobierno, a mediados de 2024.
La ampliación permitirá sumar 14 millones de metros cúbicos diarios (MMm³/d) de gas natural de Vaca Muerta, y de acuerdo al proyecto original, permitirá ahorrar divisas por importaciones de combustibles por más de US$700 millones anuales y consolidar la seguridad energética del país, con lo cual se asegura que el repago de la inversión se podrá lograr en muy poco tiempo.
El Gobierno confirmó que con la puesta en marcha de la obra formalmente denominada “Incremento de la Capacidad de Transporte de Gas Natural, en la Ruta Tratayén–Litoral Argentino”, el volumen disponible del gasoducto pasará de 21 a 35 MMm³/d, garantizando una mayor disponibilidad de gas nacional, menores costos energéticos y un fuerte impulso a la producción en Vaca Muerta.
La Resolución 397 de la Secretaría de Energía, publicada este lunes en el Boletín Oficial, dispone que el adjudicatario tendrá a su cargo la operación y mantenimiento de la infraestructura existente que integra la concesión de titularidad de Energía Argentina (Enarsa) y de la nueva infraestructura que surge de la licitación.
Tal como estipulaba la oferta, la Secretaría de Energía convalidó la propuesta económica presentada a fines de julio por la compañía transportista para poder recuperar las inversiones y gastos correspondientes a la obra de ampliación, compensar el servicio de operación y mantenimiento que el adjudicatario prestará y obtener el retorno razonable pretendido. En ese sentido, el precio ofertado fue de US$0,69/MMBtu, neto del impuesto al valor agregado (IVA).