Un policía de Sierra Grande fue baleado en la noche de este martes en circunstancias que aún investiga la justicia rionegrina. El propio efectivo, un reconocido vecino de la localidad, realizó el llamado de emergencia a la Comisaría 13 y alertó que había recibido un disparo de arma de fuego. Minutos después, ingresó por la guardia del Hospital Pablo Bianchi, donde se le diagnosticó una fractura en la tibia producto del impacto. Por la complejidad de la lesión, se dispuso su traslado al Policlínico Privado de San Antonio Oeste, donde permanece internado bajo observación médica.
Durante esta madrugada, el presunto autor del disparo se presentó voluntariamente en la Comisaría 13. Allí se le realizó la prueba de parafina para detectar restos de pólvora en sus manos, en presencia de testigos, y quedó a disposición de la Justicia. El procedimiento fue supervisado por personal del Gabinete de Criminalística y la fiscalía de turno, que deberá determinar en las próximas horas la carátula del hecho y el grado de responsabilidad penal del implicado. La investigación se encuentra en etapa preliminar, y se espera que se tomen declaraciones testimoniales y se analicen registros de cámaras de seguridad de la zona.
El hecho generó conmoción en la comunidad, dado que el policía agredido es un referente local, con años de servicio en la fuerza. Asimismo, se reforzaron los patrullajes preventivos en los barrios periféricos de Sierra Grande, mientras se aguarda la evolución clínica del agente. La fiscalía no descartó agravar la imputación si se comprueba que el ataque fue premeditado o si surgen elementos que indiquen intención de homicidio.