Los choferes de Cliba comenzaron esta mañana una medida de fuerza, que duró menos de tres horas pero que afectó la recolección de residuos.
Según informaron los mismos trabajadores, el paro se inició porque son reiteradas las veces en las que se ven imposibilitados de continuar sus recorridos habituales, debido a la rotura de los camiones. Así, exigen la incorporación de más unidades y mejoras en las mismas.
Finalmente, la medida fue levantada tras mantener una reunión con el gerente de Cliba, quien se comprometió a incorporar mecánicos a la empresa y al pago de todas las horas extras que realizan los trabajadores.